Nadie duda de que el lenguaje del fútbol es universal, ni de que en este deporte existen idiomas y matices que hacen única y singular la forma de entender el balompié en función del lugar donde se practique. En la Oviedo Cup se unen diferentes culturas del fútbol, y una de ellas es la japonesa que brota de equipos como el Vervento Kyoto, que llegó el pasado lunes a la capital del Principado.

Tenían que ser 21 jugadores, pero una indisposición de uno de los integrantes de la plantilla en el aeropuerto de Frankfurt cuando volaban de camino a Oviedo hizo que este futbolista tuviera que regresar a casa.

Comandado desde el banquillo por el técnico Eto, el conjunto japonés ya tiene experiencia en el torneo ovetense. No en vano ya participó en ediciones anteriores. "Están encantados, un poco tristes por su compañero, pero muy ilusionados", señaló Antonio, como se le conoce a la persona que tiene designado el equipo como traductor durante su estancia en el Principado. A su lado, el entrenador nipón asiente con la cabeza y subraya que "para los jugadores es una experiencia única y muy buena".

La expedición del Vervento Kyoto llegó a Oviedo el lunes pasadas las doce de la noche tras volar desde su país natal, hacer escala en Frankfurt para coger un nuevo avión hacia Madrid, desde donde tomaron un bus con destino a Oviedo. Eso sí, pararon a cenar en León, donde pudieron disfrutar de las procesiones de Semana Santa. Con el cuartel general en un hotel situado en la Avenida del Mar de Oviedo, el Vervento Kyoto ya piensa en fútbol, en la Oviedo Cup. Por eso, para llegar en perfectas condiciones al primer partido oficial ayer se entrenó y jugó un amistoso ante el Pumarín en Los Castañales. El debut será hoy a las 18.45 horas ante el San Claudio en El Cristo. "Si por ellos fuera estarían todo el día jugando al fútbol", indican desde la organización.

El plan del Vervento Kyoto es sencillo: jugar al fútbol y disfrutar. Y después, conocer la ciudad. La expedición funciona como una gran familia. Por eso "comemos en las instalaciones de Los Castañales todos días". Lo más complicado es la adaptación a los horarios y a la cultura y gastronomía, aunque "son muy educados y en este sentido no hay problema, se adaptan a todo".

Pero el acento japonés de la Oviedo Cup no solo viene de la mano del Vervento Kyoto. Y es que también tienen su hueco equipos como el Arsenal Ichikawa, el Kyoto Sanga o el Japan United. En total, la Oviedo Cup recibe a 15 equipos de varios clubes nipones que forman la delegación más numerosa de todos los que llegan del extranjero. "Siempre hemos tenido muy buena relación con los equipos de Japón", apuntan desde la organización del torneo. Tanto que durante el año vienen varias veces para conocer cómo es la ciudad y el torneo. Y parece que les gusta porque repiten. Por algo será.