Todas las reacciones tras el partido de Turín giraban en torno a Cristiano Ronaldo y, sobre todo, a su segundo gol. Al coro se unió Zinedine Zidane, que se atrevió a comparar la chilena del portugués con su volea en la final de 2002 frente al Bayer Leverkusen. "Mi gol de Glasgow fue más bonito que el de Cristiano", dijo el técnico entre risas cómplices.

Buffon, víctima habitual de CR7, le puso por las nubes: "Cristiano es un jugador de un nivel increíble. Comparable a Messi, Maradona o Pelé". Tampoco el central Barzagli ahorró en elogios: "Cristiano se ha inventado el segundo gol. Es de PlayStation".