"Tengo muchas ganas de jugar, es un partido que tenemos que ganar sí o sí. Estamos en una situación difícil y no hay otra que ganar. No se puede fallar ante el Roces", sentenció ayer Mathieu, delantero del Avilés. El jugador llegó esta semana a la ciudad desde Francia, donde estuvo recuperándose de una larga lesión y afirma que está listo para jugar hoy ante el TSK Roces, un partido vital para el Real Avilés. "Por mi jugaba todo el partido, pero es decisión del entrenador, que piensa lo mejor para el equipo", sentenció el jugador, que matiza que le falta un poco de ritmo, pero que quiere ayudar al equipo todo lo que pueda.

Y es que el Real Avilés no se puede permitir fallar en el campo del colista. Cada vez hay menos opciones de salir del pozo y estos son tres puntos que no se pueden desperdiciar. Para el partido, el técnico, Xiel, no podrá contar con Gastón, además de con Miguel Escobedo, cedido al Navarro.