El portero del Bayern Múnich Sven Ulreich pidió ayer perdón a sus compañeros y a la afición bávara por el resbalón que acabó en gol en el encuentro de semifinales de la Liga de Campeones contra el Madrid."Me duele por mi equipo y por los aficionados", escribió en Instagram. "Queríamos disputar la final como fuera, lo dimos todo y ahí cometí yo ese error. No me lo explico", prosigue Ulreich, que propició con un inoportuno fallo el segundo tanto del francés Karim Benzema, lo que supuso el empate a dos en el partido y el pase del Madrid a la final.