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Piragüismo | 82.º Descenso Internacional del Sella

Paladas victoriosas

Veteranos piragüistas destacan el "prestigio internacional que suponía ganar en el Sella"

Por la izquierda, de pie, Luis Garciablanco, Juan Manuel Feliz y Lisardo Argüelles; sentados, Mercurio Martínez y Alberto Estrada. JUAN PLAZA

Luis Garciablanco en 1962, Mercurio Martínez en 1967 y Juan Manuel Feliz en 1968 son tres ganadores del Descenso Internacional del Sella, competición patrocinada por LA NUEVA ESPAÑA y cuya 82ª edición se presenta esta tarde en las instalaciones del Grupo Covadonga en un acto en el que estarán presentes, y con ellos Mara Santos, la mujer que más veces, 22, se ha impuesto en este descenso.

Hoy Juan Manuel Feliz es el presidente del Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella (CODIS), por lo que puede decirse que buena parte de su vida gira en torno a este río. Los tres, junto al presidente de la Asociación de Veteranos del Grupo Covadonga, Lisardo Argüelles, y el presidente de la Asociación de Amigos de Dionisio de la Huerta y también ganador en mixtos, Alberto Estrada, desgranaron sus recuerdos sobre la conocida como "fiesta de les piragües".

No todos tienen la misma visión. A Mercurio le gustaría "dar valor a los que nunca han ganado el Descenso y que son los que verdaderamente hacen que el Sella sea lo que es". Sin embargo, Luis Garciablanco, ganador formando pareja con Joaquín Tuya, prefiere que prime lo deportivo, aunque no le gusta el sistema de clasificación previo, "ahora ya se sabe quien va a ganar, está entre los cuatro o cinco que salen primero, cosa que antes no pasaba". Tampoco entiende que "el Sella lo gane el mismo trece veces". Feliz le recuerda que había que organizar la salida de alguna manera porque "no es lo mismo hacerla con 150 piraguas que con 800".

Ganar el Sella suponía un gran prestigio no solo nacional, si no también internacional. Así lo resalta Juan Manuel, que este mismo año participó en el tradicional intercambio de aguas, que en esta ocasión es con el Río Negro en la Patagonia, y tuvo un recibimiento por todo lo alto, o cuando hace unos años, y en compañía de Manuel Busto, por aquel entonces ya una decena de veces campeón del mundo de maratón, eran agasajados en México como "ganadores del Sella". Feliz explica que uno de los mejores piragüistas asturianos de toda la historia, el candasín Herminio Menéndez, varias veces medallista olímpico, reconocía que "en Asturias si no ganas el Sella no eres nadie en el piragüismo". Mercurio forma parte de una familia íntimamente relacionada con el Descenso. Lo bajó su padre "que empezó para ir conmigo", y también su hermana Liana, que "fue la primera mujer que lo hizo después de la Guerra Civil. Era una cría, tendría 14 años y tuvo que aguantar de todo". Él mismo comenzó a participar cuando tenía 9 años "y ya tengo 69, no debe de haber mucha gente que lleve tanto tiempo participando". Los tres tienen a sus espaldas muchos descensos y, además de las victorias, bastantes presencias en el podio en diferentes categorías.

El próximo día 1 de julio se abrirá el plazo de inscripción para la próxima edición en la que el comité organizador espera una participación similar a la del año pasado, que rondó las 850 piraguas. Este año hay un aniversario especial ya que se cumplirán 50 de la primera salida con el cañón donado para ello por Juan Antonio Samaranch. Y también hace 50 años del triunfo de Juan Manuel Feliz. El ahora presidente del comité organizador ha decido volver a participar junto con José Luis Gutiérrez, su pareja en aquella victoria. También estará presente el ganador en K-1 de aquella edición, el británico Charles Evans, que como Feliz quiere conmemorar el triunfo repitiendo el descenso.

En todos estos años el Descenso del Sella "ha mejorado mucho en su organización", afirmación en la que todos coinciden. Alberto Estrada destaca que "afortunadamente se acabó con aquella época en la que se asociaba el Descenso a las borracheras e incluso a las drogas. Desde hace varios años los praos en los que se juntaba la gente para beber ahora son aparcamientos que evitan que se tengan que dejar los coches por las carreteras o en sitios peligrosos". Opinión que ratifica Mercurio Martínez: "El descenso es ahora una prueba mucho más seria y eso no quita para que siga acudiendo mucha gente". Entre las mejoras que se vienen observando en las últimas ediciones Estrada destaca "el desfile previo con la presencia de veteranos, está mucho mejor organizado".

Todo ello, y la presencia de miles de personas "hace que el Sella sea un fenómeno mundial".

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