Sandro Rosell, expresidente del Barcelona, negó "rotundamente" las conclusiones obtenidas "de una interesada filtración de una conversación telefónica" relacionada con el trasplante de hígado de Eric Abidal, proceso en el que asegura "no haber intervenido en modo alguno". Mediante un comunicado firmado en Soto del Real, Rosell asegura que "la filtración de una conversación telefónica privada nada tiene que ver con los hechos por los que estoy siendo investigado y por los que permanezco en prisión preventiva desde hace más de un año y pertenecen a una pieza separada secreta que ha sido además archivada".