La experiencia de Llamedo resultó clave para el triunfo. El palista más experimentado se dedicó a dirigir la embarcación y, sobre todo, a transmitir calma a su compañero. "Le quise transmitir tranquilidad a lo largo de toda la carrera", aseguró Milín Llamedo. El palista admitió que "decidimos no portear porque teníamos más que perder que ganar". Por su parte, Pedro Vázquez apuntó que "Milín conoce el río a la perfección" y aseguró que "me decía que estuviese tranquilo todo el rato, lo cierto es que hubo momentos en los que estuve tenso, pero nuestra baza iba a estar en los últimos metros".