El Zamora se llevó el Trofeo "Villa de Jovellanos" al superar al Gijón Industrial por 1-4, un resultado más abultado de lo visto sobre el terreno de juego, aunque el conjunto castellano-leonés mostró su potencial y su gran efectividad en los metros finales.

No en vano fue el conjunto de Viti Amaro el que se adelantó en el marcador gracias a un tanto de Pablo Hernández a los diez minutos de juego. Pero el equipo visitante reaccionó sobre el césped sintético de Santa Cruz, cuajando una gran primera mitad, que certificó a base de goles. Antes de iniciar su remontada, el encuentro se detuvo debido a un fuerte encontronazo entre el visitante Saúl y un jugador fabril que acabó con el primero camino del centro hospitalario debido a una posible fractura del tabique nasal.

Este contratiempo, no frenó el ímpetu del Zamora y en apenas ocho minutos, al Gijón Industrial se le fue el partido de las manos. El delantero gijonés David Álvarez fue uno de los grandes protagonistas del duelo al poner la igualada y, poco después, era el exoviedista Sergio García el que materializaba el 1-2 en un abrir y cerrar de ojos. Pero aún fue mayor la brecha cuando, de nuevo, David Álvarez marcaba el 1-3 antes de cumplirse la media hora de encuentro.

Un duro mazazo del que ya fue imposible reponerse a pesar de los intentos de reacción, pero los numerosos cambios en busca de ofrecer minutos a todos los jugadores, pausaron el encuentro. El Gijón Industrial se midió a un equipo que luchará por el ascenso de categoría y que en el último minuto puso el cuarto tanto a su favor tras un penalti cometido sobre Garbán que se encargó de transformar Dani Hernández.

A dos semanas del comienzo liguero, el Gijón Industrial prosigue con su idea de juego y, a pesar del tropiezo, dejó unas sensaciones positivas a las que aferrarse. En los fabriles se encuentra a prueba el argentino Smadi, que está dejando muy buenas sensaciones en el lateral izquierdo. En ese apartado, el equipo que entrena Amaro se encuentra pendiente de cerrar su plantilla con la incorporación de un futbolista de banda, preferiblemente para jugar en la banda izquierda. A la espera de que fructifique alguna incorporación, el Gijón Industrial mantiene la calma con una plantilla asentada en la idea de juego del técnico.