La Vuelta a España 2018 empieza a dar sus últimas pedaladas. Y, una edición más, las etapas que se desarrollen en territorio del Principado de Asturias serán decisivas para determinar quien se llevará el maillot rojo de vencedor a su casa. El Alto de la Camperona (con el Puerto de Tarna como aperitivo) en la decimotercera etapa, La Colladona, La Mozqueta y el Alto Les Praeres, en la decimocuarta para finalizar con la traca, en la decimoquinta, de una de las cotas más míticas de la Vuelta a España: la etapa de Los Lagos de Covadonga, uno de los perfiles más duros de la Vuelta, con un desnivel acumulado por encima de los 4000 metros.

La etapa de Los Lagos de Covadonga es, sin lugar a dudas, una de las más esperadas por los aficionados al ciclismo, una cumbre mítica a la que la ronda española lleva ascendiendo desde la edición de 1983, una etapa que llegaba desde Agilar de Campoo y en la que el gran Marino Lejarreta conseguiría llevarse la victoria. Desde esa fecha histórica se ha ascendido a la mítica cima hasta en 20 ocasiones, con ganadores tan míticos en la cima asturiana como Pedro Delgado, en la edición de 1985 (repetiría en la de 1992), el "escarabajo" colombiano Lucho Herrera, en 1987 y 1991 o Nairo Quintana, en la edición de 2016, última vez la que se coronó el alto asturiano hasta esta edición.

Una etapa con tanta historia y tan decisiva en el resultado final de la ronda suele traer consigo una elevada afluencia de público a lo largo del recorrido. La prueba dará comienzo, el domingo 9, a las 11:15 horas en la localidad de Soto de Ribera, una etapa que discurrirá sobre 178 km y que ascenderá los puertos de Santo Emiliano, de tercera categoría, en el km 20 de la etapa, el Mirador del Fito, de primera, y el gran final, en Los Lagos de Covadonga, catalogado como puerto de categoría especial y al que se llegará, con la mejor previsión horaria establecida por la organización, a las 17:25 horas. Se recomienda seguir las recomendaciones que la Guardia Civil dicte, teniendo en cuenta la hora en la que se cerrará la carretera que da acceso a la mítica cima asturiana.