El Langreo se mantiene invicto en el comienzo de la competición liguera y consigue unos números que permiten hablar de un arranque ilusionante. Los de Hernán Pérez suman un triunfo y dos empates, con tres goles a favor y dos en contra. Unas cifras que se convierten en una constante cada vez que el cuadro de Ganzábal juega en la categoría de bronce.

El equipo entrenado por Hernán supera, sin embargo, los guarismos de su predecesor, José Antonio Redondo. En la anterior andadura del Langreo en Segunda División B, el equipo sumó cuatro puntos en sus tres primeras jornadas. Tras empatar con el Racing de Ferrol, cayó ante el Celta B (5-1) y se impuso al Marino (1-0). El equipo terminó descendiendo.

También acabó con sus huesos en Tercera el Langreo de la temporada 2002-03, pese a comenzar la Liga con mejores números. El cuadro entrenado por Roberto Aguirre sumó siete de sus primeros nueve puntos y rentabilizó al máximo sus dos goles anotados. Mantuvo la puerta a cero.

Para encontrar el mejor comienzo del Langreo en la categoría de bronce hay que remontarse a la temporada 1996-97. Por aquel entonces, Carrete era el técnico del equipo. El club de Ganzábal hizo pleno de triunfos en sus tres primeros partidos, tras deshacerse de conjuntos como el Lugo (3-2), el Real Madrid C (2-3) o el Pontevedra (1-0). Este buen comienzo de la competición dejó a los langreanos en lo más alto de la tabla, empatados a puntos con el filial del Deportivo de La Coruña.

Los langreanos mantienen también la misma tónica desde que Hernán se sentó en el banquillo, con el club en Tercera. En la primera temporada del técnico ovetense como técnico del conjunto de Ganzábal, en la temporada 2015-16, el club había sumado seis puntos en su comienzo liguero. Por su parte, en las dos últimas temporadas, el equipo azulgrana consiguió cinco puntos -un triunfo y dos empates- en el comienzo de la Liga.

Los de Hernán quieren seguir ahora manteniendo su condición de invictos. La próxima prueba, este domingo, a las 18.00, ante la Real Sociedad B, en Zubieta.