El británico Simon Yates (Mitchelton) se proclamó ayer campeón de la 73ª. edición de la Vuelta a España, que finalizó en Madrid tras un trayecto de 100 kilómetros que empezó en Alcorcón y terminó en Cibeles con un sprint que ganó el italiano Elia Viviani (Quick Step).

En la última fiesta se coló Viviani, para firmar, tras una espectacular remontada, su tercera victoria en la presente edición, de nuevo por delante del triple campeón mundial eslovaco Peter Sagan (Bora) y del italiano Giacomo Nizzolo (Trek), con un tiempo de 2 horas 21.28 y una media de 42,8 kms / hora.

Simon Yates entró campeón en Cibeles para celebrar su primera Vuelta, su estreno en una grande. Y con hito histórico. Por primera vez Giro, Tour y Vuelta se lo adjudican en el mismo año tres corredores diferentes del mismo país.

La Vuelta que coronó a Yates consagró como esperanza del ciclismo español a Enric Mas, la mejor noticia para el pelotón nacional en tiempos de incertidumbre tras la retirada de su maestro, Alberto Contador, y a la espera de la explosión de Mikel Landa.

El ciclista mallorquín y residente en Andorra se subió al segundo escalón del podio, mientras que el colombiano Miguel Ángel "Supermán" López se aupó al tercero, idéntico puesto que en el Giro. Los tres hombres del podio con responsabilidades de futuro a asumir. Yates como relevo de Froome y Geraint Thomas; Enric Mas ya está en el foco de la afición española para siempre y "Superlópez" espera a Egan Bernal para llevar el timón del ciclismo colombiano.