Zubieta, AREA 11

Rozó la hombrada el Unión Popular de Langreo en el campo del filial de la Real Sociedad. Los locales dominaron el encuentro y crearon muchas opciones de peligro, pero Imanol Elías y sus defensas rayaron siempre a gran altura. En una gran contra, una de las escasas llegadas asturianas, Dani Abalo hacía de cabeza el 0-1, pero la defensa no pudo aguantar las embestidas guipuzcoanas llegando al final un empate que es justo para los méritos de unos y otros.

Desde el primer compás del encuentro quedaron claras las intenciones de unos y otros. El Langreo se pertrechaba muy bien protegido en su zona defensiva mientras era la Real B quien se adueñaba de la medular y de la posesión. En los primeros compases, el peligro de los donostiarras llegaba por el costado zurdo, con un activo Nais Djouahra. El mediapunta galo de origen argelino envió un disparo a la madera a los ocho minutos, un serio aviso, y poco después su intento hallaba la fenomenal respuesta del cancerbero Imanol Elías.

Una buena combinación del ataque vasco a los 35 minutos dejaba a Dávila sólo en frontal de área chica, pero el nueve no conectó y la zaga asturiana pudo despejar. El peligro era realista, con un córner botado esta vez a la derecha de Imanol con buen despeje de Alain en el primer palo.

La segunda parte arrancaba con idénticas dinámicas de juego, un Langreo bien posicionado en defensa y un Sanse que atacaba con paciencia, moviendo el cuero de lado a lado y sin precipitaciones. Guevara era el primero en intentarlo con un disparo lejano que se perdía por encima del portal langreano. Poco después era Djouahra el que probaba un chut raso que salía fuera por muy poco.

Y en medio del dominio txuri urdin, en una contra bien conducida por los astures llegaba la gran sorpresa. Un centro al área lo cabeceaba Dani Abalo con un remate cruzado que besaba las redes, imposible para el arquero realista.

Quizás era excesivo el premio, pero en fútbol el que perdona lo paga, ya se sabe, y siempre se acaba hablando de la eficacia: una opción clara, un gol. Pero la Real B volvió a acosar con más fuerza si cabe el marco de un inspirado Imanol Elías, que sin embargo no pudo hacer nada a catorce minutos del noventa cuando Naïs Djouahra, el mejor de los locales, embocaba su remate a gol restableciendo las tablas. Hernán reaccionaba con prontitud dando entrada a Cabranes para apuntalar la zaga.

A cinco minutos del noventa, Calvillo tenía en su cabeza la remontada de la Real B, pero el remate se le escapaba arriba por muy poco. E incluso en el añadido, con los locales volcados, en un nuevo contragolpe de los asturianos Riki perdía la oportunidad por muy poquito de sellar la gran sorpresa.