Jorge Sampaoli, exentrenador de la selección argentina, reconoció ayer que cada partido en el Mundial de Rusia fue "casi un sufrimiento" por la obligación de ganar que tenía la Albiceleste. Sampaoli señaló que el equipo vivió un año de mucha "tempestad, exigencia, obligación e inmediatez" en el que el cuerpo técnico y los jugadores estaban obligados sólo a ganar. A su juicio, la "mochila" que tenía Argentina era "demasiado pesada" y de ese modo era muy complicado que surgiera el talento.