El pivote avilesino Abel Serdio ha vivido en siete días el peor y el mejor momento de su vida. La pasada semana recibía la noticia de la muerte de su padre, a los 64 años de edad. Y ayer, aunque él ya lo sabía hace dos días, se confirmó su presencia en la lista de 16 jugadores de la selección española absoluta de balonmano para las dos primeras jornadas de la EHF Euro Cup 2018. "La enfermedad que tenía mi padre le ha restado años de vida. Es una pena que por una semana no me haya podido ver con la selección", lamenta Serdio.

En lo deportivo, el jugador del Recoletas de Valladolid, un joven conjunto de Liga Asobal, vive el momento más dulce de su corta y prometedora carrera. Con 22 tantos, es el segundo máximo goleador pucelano. Debutará en la ciudad sueca de Malmö contra Suecia y estará contra Noruega, el 21 y 28 de este mes.

"Es una verdadera satisfacción, pero hoy -por ayer- no me cogió tan de sorpresa", afirma el jugador asturiano. Lo dice porque ya había sido incluido en un grupo del servicio de mensajería instantánea Whatsapp con el resto de internacionales.

"No hemos hablado mucho entre nosotros, pero supongo que seré bien acogido. De primeras soy un poco tímido, pero nunca he tenido ningún problema y no creo que ahora, con España, vaya a ser la primera vez", comenta el jugador, al que todavía le dura el subidón de la primera vez de verse con "Los Hispanos". Si bien, en el combinado nacional de categoría junior estuvo en 38 ocasiones. Fue bronce en el campeonato de Europa de 2014, a las órdenes del gijonés Alberto Suárez y participó en el Mundial de 2015.

A sus 24 años, Serdio se gana la vida ahora lejos del Principado, donde no hay balonmano al más alto nivel. Sin embargo, en Avilés dejó su impronta en la cantera del Grupo Deportivo Bosco. De ahí dio el salto a la Atlética Avilesina, donde estuvo entre 2011 y 2013, en Primera Estatal, la tercera categoría del balonmano. En Gijón, dio el salto a la Liga Asobal. En el desaparecido Juanfersa Comunicalia se estrenó en la élite y estuvo entre 2013 y 2015. Jugó 71 partidos y marcó 278 goles, 256 de ellos en Liga Asobal.

Con la convocatoria para el equipo del técnico catalán Jordi Riberas, el teléfono de Serdio echa humo. "No para de sonar, estoy todo el tiempo recibiendo llamadas de mi gente allí de Asturias y de mis compañeros de Valladolid. Es una pasada. No me espera poder entrar, para mí es un sueño cumplido", afirmó. En la selección coincidirá con todo un veterano como Raúl Entrerríos. El central gijonés de 37 años, en las filas del todo poderoso Barcelona, tendrá que abrir camino a un nuevo chico de Asturias en la lista de "Los Hispanos". "Sé que en el equipo hay muy buen grupo. Ya conozco a unos cuantos jugadores, de haberme enfrentado con ellos", indicó el avilesino.

Ahora, después de haber vivido el momento más triste de su vida, el fallecimiento de su padre hace una semana, el joven pivote está frente al instante más importante de su carrera deportiva.