Cuando el Vetusta logró el ascenso la temporada pasada a Segunda B, la satisfacción se dirigía en dos frentes complementarios. El paso a Segunda B permitiría a los futbolistas crecer con mayores garantías en una competición mucho más exigente. Además, se acortaba el salto al primer equipo a una sola categoría, por lo que el filial se podía erigir en el vivero del primer equipo. Dos meses después de que la competición echara a andar, la dirección parece correcta para conquistar los dos objetivos.

Hay una tercera meta, el elemento más competitivo, el que hace mirar a la tabla. Aunque no sea una prioridad en un equipo filial, sí es una buena pista. Y en el caso del Vetusta, los números subrayan su excepcional comienzo. El conjunto de Javi Rozada está firmando el mejor arranque en la historia del segundo equipo del Oviedo. Con 12 puntos sumados después de siete jornadas disputadas (y 13 tantos a favor y 10 en contra), los azules son quintos en la tabla, merodeando incluso la zona del play-off: el Mirandés, cuarto, solo suma un punto más. Es la recompensa a un inicio de campeonato sobresaliente. Tras el tropiezo inicial en Barakaldo (2-1), el Oviedo B acumula seis choques sin perder. Con 13 goles a favor, ningún equipo ha marcado más en el grupo II de Segunda B.

Esta es la 12.ª ocasión en la que el filial del Oviedo compite en la categoría de bronce. En las once anteriores, el equipo nunca había estado tan arriba a estas alturas. Aunque los números sí son muy similares a dos precedentes. En la 1991-92, el conjunto dirigido por Novo sumaba en la séptima jornada los mismos 12 puntos (en realidad eran 8 ya que la victoria se premiaba con 2 puntos) que en la actual, aunque con peor golaverage: 12 goles a favor y 10 en contra. Era sexto. Destacaba en aquel equipo la contundencia de Pedro Alberto y el desparpajo de Pirri. También empezaba a despuntar un incisivo Armando. Aquel conjunto acabaría la competición en la zona tranquila, 11º puesto, con 37 puntos, que serían 50 con la actual puntuación.

El otro caso con un comienzo de curso similar se encuentra en la 1997-98, también con Novo a los mandos. Destacaban en aquel bloque nombres como Amieva, Rubén Suárez, Jaime o Losada. Incluso Esteban, que se haría con la meta titular en el primer equipo, disputó aquel año 3 choques con el Oviedo B en las jornadas 4.ª, 6.ª y 7.ª. A esas alturas de competición, aquel filial también alcanzaba los 12 puntos, con 10 goles a favor y 8 en contra. Se situaba en la sexta plaza.

Ahora, los de Rozada superan por un puesto esos dos precedentes. Los azules caminan con firmeza en la tabla, con el objetivo principal de formar futbolistas para el primer equipo, aunque con la intención de competir en todos los escenarios. Como objetivo de fondo, se presenta un listón interesante. El del mejor Vetusta de la historia del club. Fue el de la campaña 1990-91, analizando los puntos sumados. Miguel Sánchez entrenaba un grupo que posteriormente aportó a Armando y Andrés al primer equipo. El Vetusta finalizó el campeonato en la décima posición, con 39 puntos, que serían 53 actuales, el techo histórico.

Aunque para dar con la mejor clasificación de siempre hay que ir a la 1992-93, con el equipo noveno en la tabla. Novo dirigía aquel conjunto en el que Oli y Javi Prendes ponían la pólvora: 14 tantos cada uno, para sumar 28 de los 41 goles anotados en toda la competición. Ajeno a las marcas históricas, el Vetusta trabaja en El Requexón para preparar el choque del domingo (12.00 horas) ante la Gimnástica de Torrelavega. Una victoria podría meter a los azules en la zona de play-off de ascenso a Segunda.