"Me voy con la conciencia muy tranquila. Entrenar al Caudal era una ilusión de toda la vida. Me costó mucho ganarme llegar a ello y lo hice con mucha dedicación, pero nos faltó fortuna en ciertos momentos para que el equipo estuviera arriba, que es donde creo que acabará la temporada". De este modo se mostraba Chuchi Collado tras anunciarse el pasado martes su salida del Hermanos Antuña y la llegada de Miguel Ángel Álvarez Tomé a la entidad blanquinegra en sustitución del mierense.

La trayectoria de Chuchi como técnico caudalista ha sido corta. Apenas seis meses con un balance de 17 encuentros dirigidos entre Liga y Copa Federación en los que sumó ocho triunfos, cinco empates y cuatro derrotas. Unos resultados que han marcado su salida del club, que se anunció como una dimisión, y sobre la que el mierense reconoció que "cuando firmé por el Caudal prometí unas cosas que luego hay que cumplir y así lo hicimos". Collado se va "dolido porque no pudimos lograr los resultados que queríamos, pero "agradecido por la oportunidad que me dio la directiva de entrenar al Caudal".

Pese a su salida no oculta que "me veía con fuerzas para continuar, pero hacían falta cambios. Hubiera querido seguir hasta diciembre, cuando hubiéramos intentado reforzar al equipo en varias demarcaciones en las que el plantel cojeaba". Chuchi cree que "nos faltó desborde, jugadores que ganaran los uno contra uno y materializar las ocasiones que creábamos". Para tratar de paliar estas carencias del plantel "nuestra intención era la de hacer refuerzos. Nos faltaba fichar un mediapunta, un extremo zurdo y un delantero".

A toro pasado Chuchi hace un análisis de lo que pudo pasar a una plantilla que cree "que tiene el suficiente nivel para luchar por ganar la Liga y por el ascenso". A la pregunta de qué faltó para que el equipo estuviera arriba responde que "el equipo lo intentó por todos los medios, por implicación no fue, salvo un distraído que estaba más pendiente de otros aspectos personales que de los del equipo". El mierense no quiso dar a conocer a este jugador y recalcó que "ahora quiero hacer borrón y pensar en el futuro".

Por otro lado, el que era técnico del juvenil B caudalista, Jesús Manuel Parra, pasa a ser el ayudante de Tomé, el nuevo entrenador del primer equipo.