Desde que asumió la responsabilidad de dirigir a la selección española sub-17, Toña Is ha conseguido muchos éxitos, siempre entre la elite europea y mundial, pero hoy (23 horas, Eurosport) tiene la oportunidad de alcanzar la cima de su carrera. En el estadio Charrúa de Montevideo, España se enfrentará a México en la final del Campeonato del Mundo. Hace dos años, en el mundial de Jordania, tuvo que conformarse con la medalla de bronce. Ahora, descartadas potencias como Alemania, Japón o las dos Coreas, el oro está más cerca que nunca de las españolas.

"Tenemos el máximo respeto a México, como si fuera Alemania o Japón", advierte María Méndez, la jugadora del Oviedo que es titular indiscutible en el centro de la defensa. Méndez, que ha notado el apoyo que le llega desde Asturias, reconoce que una victoria hoy supondría un 2018 redondo: "Con la buena trayectoria en mi club y el título de campeonas de Europa, pase lo que pase es el mejor año de mi carrera deportiva".

La otra asturiana de la convocatoria, Paula Suárez, guardameta del Sporting, también está disfrutando del mundial, aunque sea desde el banquillo: "Tuvimos un pequeño bache contra Colombia, pero a partir de ahí hemos ido mejorando". Paula advierte sobre el rival: "Jugamos un amistoso contra México y es un equipo muy difícil porque su fútbolno nos beneficia mucho. Si está en la final es por méritos propios, porque ganó a selecciones muy potentes".

Toña Is confirma que no será fácil: "Los números de México en la fase de clasificación ha sido muy buenos y merecen todo el respeto". Pese a su experiencia en torneos importantes, la seleccionadora española admite que esta final es diferente: "Es un sueño poder ganar la Copa del Mundo y ahora que he visto el trofeo me ha dado un subidón enorme. Es una copa súper bonita, de las más bonitas que he visto en mi vida. Que el mejor equipo se la lleve a casa".

Los números confirman la condición de favorita de España, que lleva trece goles a favor y sólo dos en contra, por los 5 y 3 de México, una selección que se caracteriza por los resultados ajustados. Pero gracias a su solidez, las mexicanas fueron capaces de dejar en el camino a rivales del potencial de Brasil o Japón, en la fase de grupos, y de Ghana o Canadá en cuartos y semifinales. La seleccionadora mexicana, Mónica Vergara, mostró ayer su admiración por su colega en la rueda de prensa previa: "Toña es una entrenadora a la que admiro y respeto. He aprendido muchas cosas de ella".