Tras sendas victorias en las dos últimas salidas, el Langreo resultó vapuleado en Lezama tras un partido con alternativas en la primera parte, en la que jugó y mereció algo más. Pero en la segunda, el Bilbao Athletic aprovechó su velocidad y pegada -es el segundo equipo más goleador del grupo- para desarbolar las líneas asturianas.

Con Álvaro Cuello lesionado, Hernán Pérez introdujo cuatro cambios en el once respecto al que empató ante el Real Unión: Cristian, Paul Otia, Samba y Javi Sánchez. Así, la primera llegada iba a ser suya. David González metía un centro perfecto y Allyson, en el segundo palo, remataba de cabeza hacia el centro sin encontrar quien empujara la pelota. Poco a poco los bilbaínos empezaron a tocar y a jugar y provocaron dos córners, ambos sin peligro. Y en la siguiente jugada, el lateral izquierdo Rojo se convirtió en extremo y su perfecto envío al segundo palo lo introducía Villalibre.

El golpe no lo acusaron los asturianos. Samba intentó poner orden en un centro del campo que no tenía dueño. En una falta lateral a unos 40 metros de la portería iba a llegar el empate. Dani López lanzaba un balón con mucho efecto, nadie lo tocaba y el cuero se colaba con fuerza en la red. En los minutos posteriores a los cachorros sí les iba a afectar el tanto en contra, y ahora no sabían ni podían con los azulgranas. Íñigo Vicente se plantó solo ante Imanol Elías en una contra, y éste le sacaba el cuero con un pie.

Llegaron los mejores minutos de los de Hernán en el último cuarto de hora de este periodo. Se jugaba en campo vizcaíno y las llegadas con peligro se repetían. Primero sería Héctor Nespral, con un centro chut que nadie llegó a empujar, y poco después Riki, quien se marchaba y también centraba flojo para que la pelota se paseara sin que nadie pudiera introducirla entre los tres palos. El marcador volvería a moverse, en una pelota a la defensa adelantada que le llegaba a Íñigo Vicente, que esta vez no perdonaba. Se marchaba por velocidad y con una vaselina batía a Imanol.

No pudo comenzar mejor la segunda mitad para los locales. Al medio minuto Víctor se marchaba por la banda derecha y su centro hacia atrás lo remachaba raso desde el borde del área Íñigo Vicente. Lógicamente reaccionó el Langreo adelantando sus líneas, aunque ya no iba a llegar tan claramente como en los primeros 45 minutos. Sin oportunidades ni pegada, y dejando muchos espacios, iba a aparecer un Bilbao Athletic letal. Larrazábal se plantaba en solitario y tocaba ligeramente en autopase para luego remachar a placer. Y en otra internada, también por la banda derecha, Larrazábal iba a ser objeto de un penalti por parte de Cristian. Villalibre marcaba.