El Comité Territorial de Competición sancionó ayer con seis partidos al delegado del alevín B del Avilés Stadium, Alberto Peña, tras recoger el árbitro en el acta del partido que enfrentó a su equipo contra el Tineo, equipo local, insultos y un intento de animar a la afición visitante para que amenazara e insultara al colegiado del partido. El implicado lo niega todo: "Es mentira. Pone palabras en mi boca que no he dicho. Fui educado en todo momento".

Los hechos sucedieron el sábado en el partido de la Segunda División alevín entre el Tineo y el Avilés Stadium B (6-2). Según el acta redactada por Maseda Rivas, el árbitro del partido, Alberto Peña se sentó en el banquillo "sin estar autorizado". Prosigue el documento: "Debido a su inadecuada actitud, le comunico que debe colocarse detrás de las vallas que delimitan el terreno de juego. Tras colocarse allí, y junto a un grupo de 20 o 25 personas se refiere a mí como 'sinvergüenza, caradura, jeta' continuando con sus protestas y logrando que los citados espectadores profieran insultos y amenazas contra mí".

Según el acta, después del partido también hubo incidentes: "Este delegado penetra en el interior del terreno de juego y se dirige a mí a una distancia de no menos de 50 centímetros, para de forma reiterada y airada seguir haciéndome observaciones y pidiendo explicaciones".

Maseda Rivas redactó que "llegó con la citada actitud desde el interior del terreno de juego hasta la puerta de mi vestuario". Según el árbitro, allí Peña le continuó recriminando y "alzó la mano a no menos de 30 centímetros de su cara". Una vez el árbitro dentro del vestuario, que según el texto necesitó de la ayuda de directivos y aficionados para acceder al interior del mismo, las protestas continuaron. Por ello, el Comité Territorial de Competición dictaminó ayer sancionar al delegado, que además fue jugador de la primera plantilla la pasada temporada, con seis partidos.

La versión del implicado varía considerablemente con lo que dice el acta del partido. Alberto Peña presentará hoy un recurso ante la Federación Asturiana de Fútbol. "Pone palabras en mi boca que jamás dije. Me comporté en todo momento con respecto y educación. He alucinado cuando me he enterado del veredicto", explicó ayer a este periódico el delegado del Stadium alevín.

"En el acta pone que le levanté la mano dos veces cuando fue al revés, fue él el que me la levantó a mí", protesta Peña, que reconoce que sí se produjeron insultos por parte de la afición visitante, pero niega que formara parte de ellos y mucho menos que instigara a nadie contra el árbitro. "Un padre se enfadó porque su hijo se lesionó y el árbitro le dijo 'venga, levántate de una vez ¿Qué pasa, que te quieres ir a comer el bocadillo'", afirma Peña. Dicha lesión, una rotura de fibras, aparece reflejada en el acta del partido.

Peña también rebate que se sentara sin consentimiento del árbitro en el banquillo. "Al ser dos delegados, solo podemos estar uno, pero nos dio permiso. Es cierto que protesto y me dice que me vaya. Entonces me salgo, pero no le insultó. Fue con lo de la lesión de mi jugador y con lo que él dijo cuando todo se empezó a caldear", reconoce Peña, que además es jugador de fútbol sala en un equipo de Castrillón.

Fuentes del Tineo también reconocen como excesiva la sanción y afirman que lo que dice el acta no sucedió de tal forma. "El delegado fue correcto en todo momento", dicen.