"Cuantos menos niños estén ingresados mejor". Los deseos del guardameta del Real Avilés Borja Piquero fueron escuchadas en estos días tan señalados. La planta de pediatría del Hospital San Agustín de Avilés presentaban poca actividad. Salvo la de la pequeña Naia, de dos meses, que se encontraba aislada. A pesar de ello, los jugadores del Avilés Borja Piquero, Alexis Lemus, Carlos Núñez y Marcos Blanco, junto al utillero Sergio Álvarez y el relaciones institucionales Sergio Huerta no dudaron en acudir para sacarles la mejor sonrisa a los más pequeños.

Cargados de regalos, con principal colorido blanquiazul, mostraron su lado más cercano. "Ojalá que sea lo menos posible y que las próximas navidades las disfrute en casa", indicó Borja Piquero a su padre José Ramón Pombo. Los blanquiazules también acudieron a la zona de urgencias, donde se encontraba el bebé Pelayo y Elías, de 2 años y nueve meses. El pequeño se llevó la equipación completa del Avilés y no dudó en lucirla por los pasillos del Hospital avilesino mientras era reclamado para visitar la consulta.

También recibieron todos ellos unas entradas para acudir al Suárez Puerta y disfrutar de los jugadores, esta vez sobre el césped. Los jugadores le indicaron a Elías que "le queda muy bien el blanquiazul". El futbolista Marcos Blanco indicaba tras la visita que "es una iniciativa muy bonita, ojalá se repitan más como ésta para llegar más a la gente y que se haga más afición". El blanquiazul, uno de los más destacados durante la temporada en las filas de Juanma Castañón, se alegró de que "por suerte no había muchos niños, ojalá se les haga más amena la estancia con nuestra visita". Una presencia que en los últimos años no se había producido por parte del Real Avilés, que trata ahora de recuperar esta tradición para hacer por unos minutos de improvisados Reyes Magos.

Acostumbrados a llevarse los aplausos sobre el terreno de juego por un gol, un buen pase o una parada, como el caso de Álex Lemus (que podría debutar mañana ante el Ceares), para los jugadores del Real Avilés supone "incluso más que una buena parada, son sentimientos que te llenan completamente". El canterano, como el resto de la representación de la plantilla que acudió al Hospital de San Agustín resaltó que se trataba de "un día especial, es bonito hacerles felices y darles un regalo". Para completar las fiestas navideñas, el equipo avilesino tratará de completarlo con los tres puntos de mañana (12 horas) frente al Ceares. Sería su último regalo de Reyes.