El exfutbolista Paul Gascoigne se declaró ayer inocente ante un jurado inglés de la acusación de asalto sexual que pesa sobre él por haber besado sin consentimiento a una mujer en un tren. El exjugador, de 51 años, fue arrestado en agosto cuando viajaba en un tren entre York y Newcastle por besar a una mujer. Durante la audiencia de diez minutos, el juez tuvo que pedir a Gascoigne en varias ocasiones que mantuviera silencio. Gascoigne estuvo en tratamiento por su alcoholismo.