Víctor Pérez es historia del Oviedo Baloncesto, el tercer jugador que más partidos ha disputado (199) con el equipo desde que se fundó el club. Llegó a Oviedo en 2012 y desde entonces ha conseguido un ascenso a LEB Oro, ha disputado cuatro veces el play-off de ascenso a la ACB y ha levantado una Copa Princesa. Una trayectoria que el viernes (21 horas), si no hay contratiempos de última hora, alcanzará la cifra redonda de 200 partidos disputados con la camiseta del OCB. "Es un honor cumplir 200 partidos en este equipos, nunca me había sentido tan a gusto en un club como en el Oviedo y es algo especial, algo bonito", dice el escolta sevillano, de 36 años.

El jugador que más partidos ha disputado con el Oviedo Baloncesto es Agustín Prieto, con 263; detrás llegan Adrián Macía, con 220; Víctor Pérez, con 199; y le sigue de cerca Héctor Macía, con 197. Víctor es, además, el nexo de unión con estos jugadores que llegaron al club durante sus primeras temporadas y que se fueron con el equipo ya en la LEB Oro. Adrián Macía fue el único de todos ellos que hizo la trayectoria completa, empezando en Primera Nacional y acabando en la segunda categoría del baloncesto español. Víctor llegó con el Oviedo Baloncesto en LEB Plata, ascendiendo junto a Prieto y los hermanos Adrián y Héctor Macía, con los que también compartió el debut en LEB Oro.

De esos primeros compases rescata el capitán del Oviedo Baloncesto algunos de sus mejores momentos en el club. "El partido que ganamos en Guadalajara después de que ellos nos ganaran en la final de la Copa LEB Plata y que nos acercaba mucho al ascenso fue un punto de inflexión y un momento memorable", explica. Tampoco se olvida el escolta del día que aseguraron matemáticamente el ascenso a LEB Oro, en las Islas Canarias, frente a un Gran Canaria en el que estaban los que años más tarde serían jugadores del OCB Fabio Santana y Mouhamed Barro, y un tal Tavares, ahora en el Real Madrid.

Reconoce también el capitán del OCB que de la segunda temporada es difícil elegir un solo momento: "No me puedo ganar con uno, la remontada en el play-off ante el Palencia, la victoria en la última canasta ante Andorra, el partido del Clavijo (ese día el Oviedo Baloncesto ganó con una canasta a falta de 0.78 segundos),...". Pero, de todos esos momentos, uno destaca sobre el resto. El que experimentó en la temporada 2016-17 con la victoria en la Copa Princesa: "Fue culminar todos esos años, si me tengo que quedar con uno me quedo con el éxtasis de ganar la Copa".

También está claro el momento que sueña con alcanzar en Oviedo, aún siendo consciente de la dificultad: "Indudablemente el ascenso, subir quedando primeros va a estar difícil, sobre todo con un equipo como el Betis, pero hacerlo con el formato que hay este año de final a cuatro sería increíble, superaría lo de la Copa. Por soñar...".

De momento, el capitán solo pide al año que acaba de comenzar que las lesiones les den una tregua y que lleguen todos sanos para pelear por esas grandes metas, que no se repitan momentos duros como la lesión de Fran Cárdenas. El viernes se pondrá a 200 pero Víctor quiere más.