Cuando Carol Fonseca, una de las capitanas del Rodiles, miró la clasificación el pasado fin de semana se dio cuenta de lo que estaban consiguiendo. El conjunto femenino de Villaviciosa, que milita en Segunda División de fútbol sala, afronta este fin de semana la última jornada de la primera vuelta, y lo hace a solo nueve puntos de la tercera plaza, mientras que la permanencia la tiene a 14 puntos de distancia. "Estamos en una posición que igual no esperábamos. El principal objetivo era la permanencia, pero se está reflejando el trabajo que hacemos, y ahora tenemos más cerca el ascenso que el descenso", cuenta Fonseca. "Si apretamos igual podemos hacer algo guapo esta temporada. Podemos soñar con acabar entre las seis primeras", subraya.

El Rodiles afronta su segundo año en la categoría, con la ilusión de seguir creciendo. Es la referencia del fútbol sala femenino en Asturias. Poco a poco en Villaviciosa se van sumando más chicas a la causa, que empiezan a practicar este deporte. Y lo hacen con la ayuda de otras jugadoras de la región que empezaron a jugar al fútbol en el Oviedo y el Sporting, y que ahora disfrutan del fútbol sala en Villaviciosa. En el Oviedo Moderno jugaron Carol, Juli, María, Rosana, Sonia y Paula. Mientras que en Mareo estuvieron con el Sporting Sonia García, Romina y Jesi.

Carol juega de pivote, tiene 28 años, y afronta su cuarta temporada en el Rodiles. Desde los 11 a los 21 jugó en el Oviedo Moderno, momento en el que pasó al Oviedo 06 de fútbol sala, antes de afrontar este proyecto en Villaviciosa. "No soy goleadora, me gusta más llevar el control del juego", reconoce. "El fútbol sala me gusta, pero cuando empecé con 15 años no había un equipo competitivo en Asturias ni este deporte estaba tan potenciado como el fútbol de campo. Por mis condiciones físicas puedo destacar más en el fútbol sala y me encuentro muy cómoda jugando", resalta.

Su experiencia en el Oviedo Moderno le sirve ahora para ayudar a las más jóvenes que comienzan este deporte. "La base técnica y táctica la aprendí allí, el regate en corto, el control o el ambiente de vestuario. Ese ambiente de estar un equipo competitivo y de haber jugado partidos importantes me sirve ahora, y así lo intento trasladar a las más jóvenes del equipo", cuenta Carol Fonseca.

Sonia García, por su parte, acaba de aterrizar a sus 22 años esta temporada en Villaviciosa. Comenzó a jugar con cinco años al fútbol en el San Lorenzo de Gijón junto a otros niños, antes de pasar por los tres equipos referentes de la región de fútbol femenino en campo: el Gijón, el Oviedo y el Sporting. "Hice amistades, aprendí todo del fútbol y disfruté jugando en categorías en las que jamás habría pensado que iba a tener la oportunidad de competir", comenta. Este verano decidió cambiar al fútbol sala. "Me costó un poco, pensé que iba a ser más fácil y parecido, pero hay diferencia. Me ha sorprendido mucho el nivel que tenemos en el equipo", relata García, que antes jugaba como central en fútbol campo y ahora actúa de pivote en sala.

El Rodiles jugará este fin de semana en casa frente al filial del Ourense, club que les aventaja en cuatro puntos en la clasificación. De ganar, el conjunto maliayés cerraría la primera vuelta con 23 puntos.