Isabel Corte Peláez, "Isina" (Riaño, 1996), no podrá jugar este domingo el derbi femenino ante el Sporting en Mareo (12.15 horas). Una lesión de tobillo en el último encuentro de 2018, ante el Dépor en El Requexón (1-3), la tiene apartada. Isina, máxima goleadora azul con 12 goles junto a Villamayor, no jugará, pero confía en la victoria azul y sabe que habrá más encuentros de máxima rivalidad. Mientras se recupera de su lesión, la segunda del curso, ("poco a poco") vislumbra, en un futuro cercano, un derbi de mujeres con un estadio repleto y toda Asturias pendiente. "¿Por qué no? Ojalá. Ya contaba con ello para este año, siempre te lo imaginas. Cuando voy al Tartiere a ver a los chicos lo pienso. Pienso que se llenará para vernos. Un día llegará, porque el fútbol femenino va a más", cree Isina, que analiza el derbi de chicas: "En el derbi de chicos hay más piquilla, creo que nosotras lo afrontamos con más normalidad. Yo tengo muchas amigas en el Sporting, incluso compartí piso en Oviedo hace poco con Isa (jugadora rojiblanca). Jugábamos un derbi y volvíamos para casa, los asuntos de fútbol se quedaban en el campo".

Isina ha vivido la explosión del fútbol femenino de primera mano en Oviedo. Lleva en la entidad casi una década, desde que tenía 14 años. Vivía en Infiesto y fichó por el filial azul tras haber estado en el Fútbol Sala de Infiesto y en la Escuela de Fútbol del Oriente, equipos mixtos. "Me llamó el Oviedo Moderno y no me lo pensé. Era un tute, porque cuando entrenábamos salía de casa a las seis y media y volvíamos casi a medianoche. Estuve en el B el primer año y luego ya pasé al primer equipo", recuerda. Las cosas han cambiado desde esos tiempos. Ahora tienen más equipos en la cantera y forman parte de la estructura del Oviedo, aunque quedan cosas por hacer. "Nos falta mejorar un poco las instalaciones, en el Díaz Vega no entramos todos. Todo llegará con tiempo y esperemos que el Oviedo absorba todo", explica la jugadora, que además es entrenadora del primer equipo benjamín del Oviedo Femenino y dirigió dos temporadas a las infantiles. Uno de los escenarios donde más se nota el auge del fútbol femenino es en los medios.

- ¿Cómo se porta la prensa con el deporte de chicas?

-¡Bien, ho! Se nota mucho. Cada vez cuentan más con nosotros y eso es muy importante, salimos en muchos sitios, hacemos entrevistas... Es importante.

A Isina el fútbol le viene de familia: "Nací con ello". Su padre, Antonio, jugó de joven, en fútbol sala y en campo ("decían que era muy bueno"), y es un apasionado, incluso fue delegado del Oviedo Moderno. Junto con su madre, María Isabel, va a todos los partidos y no para de hacer fotografías, su pasión. "Mi primera equipación fue la del Oviedo y de pequeña iba al Tartiere", dice Isina. Su amor al club está por encima de muchas cosas. Encima, incluso, de ofertas que tuvo de Primera. "Quiero seguir en el Oviedo e intentar subir. No tengo prisa, tengo 22 años y hay que tener la cabecina tranquila", apunta. Con los estudios casi terminados, se ve vinculada al fútbol como profesional cuando deje de jugar: "Me encantaría. Disfruto con el fútbol, veo todos los partidos, tanto de chicos como de chicas". Isina lo tiene claro para el domingo: "Será difícil, vienen en una buena dinámica, pero hay que sumar de tres en tres".