El Langreo puede dejar la permanencia vista para sentencia en el choque que mañana le mide al Izarra (Merkatondoa, 17.00 horas). El equipo azulgrana quiere aprovechar su buen momento para seguir sumando, algo de lo que es consciente su entrenador, Hernán Pérez. "La dinámica es muy buena, estamos fuertes en casa en cuanto juego y a resultados. Fuera de casa estamos fuertes en juego, pero nos faltan los resultados", admite el entrenador. Es por ello por lo que en tierras navarras buscarán dar un golpe encima de la mesa. "El nivel de los rivales en los últimos partidos ha sido alto, pero tenemos que seguir jugando igual que lo estábamos haciendo", destaca Hernán.
El triunfo de la semana pasada ante el Arenas de Getxo ha servido para mantener alta la moral del vestuario. "La gente está motivada, todos se sienten importantes, participan y lo hacen bien", asegura el entrenador. Jugadores como Aimar o Cabranes han adquirido importancia. "Trabajan en silencio y aprovechan su oportunidad, nos alegra a nivel colectivo".
Un triunfo mañana dejaría al Langreo con una ventaja de 15 puntos y el golaverage respecto al descenso directo. "Seguiremos pensando que tocará luchar hasta el final", admite el entrenador. Una permanencia que Hernán cifra en 44 o 45 puntos. "En cuanto los tengamos, será momento de sentarnos con los jugadores y preguntarles por nuevos objetivos. Por la disposición que tienen creo que nos van a decir que quieren más", asegura. Pese a todo, Hernán no oculta la relevancia del objetivo inicial del Langreo. "Es algo importante para el club, lleva mucho tiempo sin mantenerse en Segunda División B, hay que cerrar eso primero".
Respecto al Izarra, Hernán apunta que "es un buen equipo, que empezó bien la temporada y que, tras un pequeño bajón, se reforzó bien en invierno y está adaptándose tras realizar varios refuerzos". El entrenador del Langreo es claro: "Es un equipo que no nos lo va a poner nada fácil".
