Doc Rivers, entrenador de Los Ángeles Clippers, que ganaron por 121-112 los Mavericks de Dallas, sorprendió a todos en la madrugada del lunes al pedir un tiempo muerto y dedicarlo al ala-pívot alemán Dirk Nowitzki. A falta de nueve segundos, Rivers pidió el micrófono del campo y saludó a Nowitzki, quien recibió una gran ovación de todos los aficionados en el que fue su partido número 1.500 como profesional.