A Mario Gorgojo le va a costar mucho dinero representar a España en el Campeonato del Mundo de natación en aguas gélidas que se disputa desde el viernes en Múrmansk, en el extremo noroeste de Rusia, ciudad próxima a las fronteras con Noruega y Finlandia. Nadará en aguas que han surgido después de romper el hielo y que siguen líquidas porque no dejan de moverlas para evitar que se congelen de nuevo.
Allí donde el agua quema, las energías se derriten y el frío anestesia el cuerpo, el de Navia tratará de colgarse alguna medalla y de mantener vivo un sueño que ahora se hace un poco más real. "En esta prueba estarán representantes del Comité Olímpico porque hay muchas opciones de que incluyan este deporte en los Juegos de Invierno en 2022. No sé si va a ser en una categoría única o cómo lo van a hacer, pero ahora mismo estoy entre los quince mejores tiempos y no creo que vaya a crecer mucho", dice sobre sus opciones de estar en la cita de Pekín.
Pero más allá de eso, Gorgojo aspira a disfrutar de este deporte y a popularizarlo. Otro de sus sueños es organizar una prueba de estas características en Asturias: "Intentaremos venir con datos para en un futuro organizar algo por los Picos de Europa. Cuando enseñas Asturias fuera te das cuenta de lo que tenemos, hay que moverse. Es complicado, pero sería maravilloso organizar algo", explica el naviego.
Gorgojo viaja a Rusia con su mujer y allí se juntará con otro español, Diego López, que llega procedente de Estados Unidos. En su anterior experiencia en un Campeonato del Mundo, en Tallin (Estonia), Gorgojo fue el único representante español, pero en esta ocasión se le ha unido un compañero. "Es el primer español que hizo la triple corona, cruzar nadando el canal de la Mancha, el canal de Catalina y la isla de Manhattan; seremos los únicos españoles. Habrá 33 países y 400 nadadores", explica Gorgojo, que lamenta el poco apoyo que ha tenido por parte de la Federación Española de Natación: "Escribimos a la Federación y no nos dio ningún apoyo, el tema de los Juegos es solo en los años previos".
El asturiano participará en tres pruebas, 1.000, 500 y 50 metros, en las dos primeras con la aspiración de colgarse una medalla y en la otra por probar. "El viernes nado los 500 metros, el sábado los 1.000 y el domingo, no sé muy bien por qué, los 50 metros", dice Gorgojo, que explica que esta competición tiene más nivel que la prueba de la Copa del Mundo que nadó a principios del pasado febrero: "Hay un búlgaro y un rumano con mucha trayectoria, que han participado en Juegos Olímpicos, pero no de invierno, y que son prácticamente inalcanzables. En la prueba de 1.000 metros podría optar al bronce y en 500 tengo más posibilidades de quedar tercero si me sale bien la prueba".
Las condiciones serán aún más extremas que en el lago Bled, en Estonia, donde fue su anterior experiencia. "El agua está por debajo de cero grados y la temperatura ambiente está entre -15 y -20 grados. Para el fin de semana dan nieve, lo que puede hacer que suba un poco la temperatura. Yo solo espero que haya buenas salas de recuperaciones, que esté el ambiente caliente. Por mi parte, voy preparado en cuanto a ropa de abrigo", añade. Una preparación que ha incrementado un poco más el presupuesto de una aventura que le va a dejar sin vacaciones este verano: "Sin contar ropa, el viaje me saldrá por unos 2.000 euros".
