Diego Polo marcó el pasado fin de semana contra el Caudal su primer gol con el Real Avilés. Cuando lo hizo, se fundió en un fuerte abrazo con todo el banquillo. Para el delantero no está siendo una temporada sencilla, puesto que la mala suerte le ha negado el premio del gol en varias ocasiones. Ahora, tras su primera diana, se siente confiado en sí mismo y en la victoria del Avilés contra el San Martín. "Ellos van a venir a muerte", afirma el ariete.

Polo se había afeitado el día antes de jugar contra el Caudal. "Al ir a celebrar el gol, mis compañeros me dijeron que por eso había marcado", bromea el jugador. Un pequeño chascarrillo para aliviar una temporada que no está siendo sencilla. "Cuando me lesioné, quise volver antes de tiempo y eso me perjudicó. Pero ahora ya me siento atrevido otra vez. Sé que el entrenador confía mucho en mí y espero que todo vaya rodado", comenta el avilesino.

El partido contra el San Martín es toda una final. Los dos equipos llegan con 30 puntos, cuando solo restan 18 juego. En la ida, el Avilés ganó por solo un gol, por lo que el goal-average también está sobre el tapete. "Es un buen equipo, pero no tienen nada hecho todavía, va a ser duro, pero tras el día del Caudal estamos confiados", comenta.

Para este encuentro, el Avilés tiene las bajas de Berto, Naranjo y José Antonio. Habrá que comprobar si ante esta última ausencia, Castañón vuelve a confiar en Barra, casi sin minutos desde el partido contra el Tuilla.

"Tenemos bajas sí, pero contra el Caudal también y plantamos cara", se reafirma Diego Polo, que espera, como el resto del Real Avilés ganar la final por la permanencia y dar un golpe encima de la mesa.