El Marino de Luanco experimentó una mañana diferente. No fue por un sistema revolucionario en el entrenamiento, sino por la visita de 60 escolares del colegio público La Vallina a la sesión de trabajo del equipo de Oli. Al entrenamiento acudieron los más jóvenes del centro escolar, es decir, pequeños de entre tres y cinco años.

Los escolares visitaron la sala de trofeos del conjunto marinista y el resto de instalaciones del campo municipal de Miramar. Además, charlaron con miembros del primer equipo e integrantes del cuerpo técnico. A mayores, se les repartió entradas para el partido de este domingo contra el Real Avilés, con la idea de que acudan al mismo acompañados de sus padres. Próximamente, se espera una nueva visita de este centro escolar de Luanco.