El Teslacard Círculo Gijón firmó su descenso de categoría al perder su duelo ante Menorca (72-80). Además, sus rivales no fallaron. El equipo de Nacho Galán cayó con la cabeza alta, peleando hasta el último instante e ilusionando a la afición. Resta por ver lo que sucederá en verano y la posibilidad de que alguna plaza quede libre. El equipo gijonés, al finalizar séptimo, sería el primero en optar a una vacante.

El inicio no fue el deseado, ni mucho menos, con varias canastas sencillas por parte de Menorca propiciadas por los errores locales. Matali, como sucedió en la ida, hizo mucho daño a un Teslacard nada certero en el lanzamiento (1/7 en triples) y con pérdida tras pérdida (2-13). A ello se sumó un conjunto menorquín llamativamente metido en el partido, celebrando cada una de sus canastas con euforia -no se jugaba nada en el envite, más allá del esperado fair-play deportivo-. A pesar de los duros golpes, el equipo de Nacho Galán salió relativamente vivo (15-23), pero debía de cambiar el panorama si quería cumplir con el primero de los objetivos: vencer su duelo.

Al Teslacard Gijón le temblaba la muñeca en cada tiro, con un bajo porcentaje, errando canastas en cómodas posiciones. Los ataques eran atropellados, un tanto a la desesperada en busca de frenar una sangría que iba a más con el paso de los minutos ante los suspiros de Galán (22-39). Un triple sobre la bocina de Kimbrough, desde más allá de 8 metros, le dio a los gijoneses una bocanada de esperanza antes del descanso, pero con un Menorca muy superior (31-44). Y la situación se agravaba al visualizar los resultados de sus rivales. L'Hospitalet empataba y Eleyco Baskonia perdía de 5 puntos. Pero de nada servía sin la victoria gijonesa.

Susto de Hernández

Si ya tenía problemas el equipo gijonés, Osayande se cargaba con cuatro faltas a falta de 17 minutos. Un bloqueo de Prinsloo desplomó al base menorquín Hernández, que se quedó inmóvil en la cancha, de la que fue retirado en camilla y con un collarín. Fue justo en el momento en el que Saúl Blanco, con dos triples seguidos, invitaba a la heroica acercando al Teslacard a nueve puntos (39-48).

El capitán del Teslacard pedía calma ante las malas decisiones tomadas por Osayande y Kimbrough. El alero americano, eso sí, no le perdía la cara al partido y demostraba una gran confianza en cambiar su dinámica. Saúl Blanco se echaba el equipo a las espaldas, triple tras triple, pero Menorca era letal (57-67).

Por delante solo restaban diez minutos para decidir la permanencia o no del equipo gijonés en la LEB Plata. Con L'Hospitalet encaminando su partido, las esperanzas se ponían en la igualada entre Eleyco y Albacete. Pero de nada servía sin el triunfo del Círculo Gijón. A los gijoneses no se les puede negar el pundonor demostrado en cada acción. El público entró en juego y los gijoneses se enchufaron para pelear por la remontada. E igualó el partido a 71 puntos a falta de 2:35 minutos. De nada servía el triunfo porque L'Hospitalet y Baskonia confirmaban sus victorias sin que finalizase el duelo en el Palacio, que se cerró con derrota por 72-80, consumando el descenso.