El deporte asturiano todavía no sale de su asombro sobre una polémica sexista -el regalo del vibrador a las cuatro jugadoras del squash el pasado sábado en Las Vegas (Corvera)- que ha inundado el panorama mediático nacional. Incluso llegó a la televisión pública británica, la BBC. La regatista gijonesa Ángela Pumariega, número 2 la candidatura del PP al Ayuntamiento de Gijón, pidió respeto para el deporte femenino. "Como deportista y mujer sólo puedo decir que el deporte femenino está de moda y el futuro es tratarlo con respeto. El respeto en cualquier relación es lo primero, y el deporte femenino se lo merece. Tenemos que pensar que a nadie se le ocurriría hacer eso con los hombres. No creo que a nadie se le ocurriera regalarles algo así", apuntó la gijonesa.
Nacho Galán, entrenador del Círculo Gijón Baloncesto, no encuentra explicación a lo sucedido: "Me parece una falta de educación absoluta, totalmente fuera de lugar. No entiendo en qué cabeza cabe hacer este regalo a nadie, y menos a unas deportistas. Es totalmente incomprensible y hace flaco favor a la labor de los patrocinadores para con el deporte, ademas de dejar a todo el mundo en mal lugar. No sé en qué momento alguien pudo decidir eso, es increíble", señaló. Beatriz Álvarez, la presidenta del Oviedo Femenino, lamenta lo sucedido y catagola los hechos como un "error inadmisible" en el deporte.
Sita Méndez, presidenta del Femiastur de Avilés, cree que el episodio del vibrador es una muestra más de los problemas de género en el deporte nacional: "Es la prueba que demuestra en manos de qué personas se encuentra el deporte femenino. Una muestra de la realidad que se vive en el día a día a la hora de organizar eventos deportivos. Demuestra una evidente falta de formación en materia de género" , indicó. Amalio Álvarez, director deportivo del club baloncesto ABDA avilesino, cree que es un bochorno que lo sucedido pase en el mundo del deporte: "Me parece un regalo inadecuado para una competición deportiva, porque eso no tiene nada que ver con el deporte. El tema sexual y lo personal se debe solventar fuera del deporte. Parece más una broma, propia de una despedida de soltera que de una competición deportiva", afirmó. Carlos Fernández, el entrenador del Judo Avilés, no cataloga lo ocurrido de sexista y lo atribuye a una estrategia empresarial: "Es un regalo que está fuera de lugar y que no casa con un evento deportivo. Pero no me parece sexista, porque me parecía que estaría igual de fuera de lugar si se lo hubiera regalado a los hombres. Me parece una jugada maestra del patrocinador", cree el técnico.
En los clubes deportivos de las cuencas también mostraron su indignación. La atleta blimeína Bárbara Camblor, campeona de España y medallista absoluta en 400 metros lisos, cree que "está fuera de lugar, es una actitud discriminatoria, sobre todo por la época en la que vivimos" y reconoce que, a lo largo de su carrera no se ha topado con actitudes discriminatorias. "Tuve suerte esa suerte en todos los deportes que practiqué, entre ellos el fútbol", apunta.
Por su parte, la capitana del Cuencas Mineras de la OK Liga de hockey patines, Mili Puig, reconoce que se quedó sorprendida al enterarse de los premios. "Flipamos", admite. La jugadora cree que "es algo indignante, que hay que denunciar para que toda la gente lo vea, me parece una falta de respeto".
La judoca Marta Fernández, campeona de varias Copas de España con el Mieres, asegura que "es algo absurdo, esos descuidos no pueden pasarte" y cree que "en ese caso, a los chicos habría que haberles dado el mismo regalo". A lo largo de su carrera, la mierense no se ha encontrado con actitudes sexistas en entregas de premios, pero sí reconoce que "sí que se nota que en los deportes de contacto hay menos mujeres".
