Ayer se pescaron once piezas en los ríos salmoneros asturianos. En el coto Monejo, del río Cares, se logró el primer cupo de la temporada -tres piezas como máximo en una jornada- logrado por tres pescadores vascos, a cebo natural. Los autores fueron Carmelo Altuna Letamendi, de Doñate (Guipúzcoa), de 3,100 kilos; Juan Luis Insusi Inchaurre, de Bilbao, de 4,550, y Juan José Ibarra Landeta, de Zalla (Vizcaya), de 6 kilos. Realizaron la faena con rapidez, puesto que bajaron al río a las nueve de la mañana y a las once ya lo habían conseguido.
En el Narcea se echaron a tierra cinco, todos ellos sacados también a cebo natural. Ninguno de quienes los sacaron quisieron facilitar sus datos personales. Salieron en la zona libre, 4,820 kilos; en el coto Carbajal, de 5,490; en Arenas, 4,685; en La Isla, de 6 y en La Bouza, 4,800. Estos dos últimos fueron donados al proyecto Arca. En el río Sella se precintaron ayer dos salmones, uno sacado por Manuel Ángel Llano Puente, de Gijón, de 4,190 kilos, a cucharilla, en el coto La Uña, y un pescador parragués que no facilitó sus datos personales, de 4,690, a cebo natural, en el coto El Aliso. Y en el Eo sacó uno Carlos Reija Gómez, de Lugo, de 5,750 kilos, en el pozo Ouruz del coto El Cairo. Hoy, como cada jueves no festivo, es jornada de descanso.
La temporada, hasta el momento, sigue su ritmo discreto, destacando especialmente la ausencia de capturas en el río Esva. Es el año en el que más se retrasa el campanu. Hasta la misma fecha de ayer, en temporadas anteriores se habían pescado 477 (2105), 212 (2016), 118 (2017) y 111 (2019). Este año hasta ayer se llevan precintados 168.
