El Langreo tendrá que llevar a cabo una profunda reestructuración de cara a la nueva temporada. La buena temporada de muchas de las piezas básicas del conjunto azulgrana les ha hecho revalorizarse y es probable que busquen destinos lejos del conjunto asturiano. Si bien en la pasada temporada los de Ganzábal fueron capaces de mantener a buena parte del bloque del ascenso, parece que retener a los integrantes que han conseguido la permanencia será más complicado.
Futbolistas como Adrián Torre o Cristian, ambos langreanos, tendrían cerca su continuidad en el club. Eso sí, a la espera de conocer quién será definitivamente el entrenador para la nueva temporada.
Otros jugadores como Riki, hace tiempo que tienen su futuro lejos de Ganzábal. Su buena temporada en el eje de creación del equipo azulgrana propició el interés de otros conjuntos. El Real Oviedo fue el más rápido y el mediocentro regresará al equipo en cuya cantera se formó, ahora para jugar en el filial.
Otros jugadores asturianos, como David González, Álvaro Cuello o Héctor Nespral también se han revalorizado esta temporada y han llamado la atención de clubes de Segunda B.
Un caso complejo es el de los futbolistas de fuera de la región. El defensa Zubiri ha sido pieza importante y está cotizado, mientras que el portero Imanol también buscará acomodo en otro equipo tras la falta de minutos en esta temporada. Aimar Gulín, tras dos años en el club, también podría probar fortuna en un equipo más cercano a su hogar.
Tampoco tendrán muchas opciones de continuar los cedidos. Tanto Dani Abalo como Samba regresarán a sus clubes de origen. El gallego ha sido pieza clave en esta temporada, mientras que el centrocampista ha actuado como revulsivo en muchos encuentros y solamente ha jugado 17 como titular. Otro caso complicado es el de Otia. La pérdida de condición de sub-23 del defensa central camerunés también hace complicada su presencia en Ganzábal una campaña más.
Además, otro de los integrantes de la plantilla, Dani López, dejará su puesto en el lateral zurdo para encargarse de la dirección deportiva. Una de sus primeras misiones será la de contratar un entrenador que rija los destinos del club de Ganzábal una campaña más en Segunda B.
