Saboreó las mieles del fútbol con varios ascensos: a Segunda B con Real Oviedo B y Lugo y a Primera con Real Oviedo y Compostela; y también le tocó vivir la cara más amarga de este deporte, con diez meses de impagos en el Mensajero. Tras seis años alejado del mundo del balompié, al que estuvo ligado por última vez hace seis años en un negocio de representación con Luis Bernardo Pérez "Luisber", José Álvarez (Granada, 1967) ha sido designado como hombre de confianza en la ciudad por los nuevos gestores del Real Avilés, Norte Proyectos Deportivos Mallorquines.
- ¿Le costó mucho dar un paso adelante y aceptar la oferta de Norte Proyectos Deportivos mallorquines para ser su mano derecha en el Real Avilés?
-Lo cierto es que sí. Cuando me lo propusieron mi primera respuesta fue "no". Y la segunda y la tercera. Al final acepté porque esta gente siempre se ha portado muy bien conmigo y han cumplido su palabra. Ahora necesitaban a alguien aquí de su confianza, que sepan que va a hacer lo que ellos digan y he decido ayudarles, también en señal de gratitud.
- ¿Qué hacía hasta ahora?
-Vivir. Jugaba algo a pádel, aunque tengo una rodilla tocada, iba al gimnasio con mis amigos...
- Hace décadas que colgó las botas y, además, lo hizo muy joven. ¿A qué se dedicó luego?
-Me retiré con 28 años. No sabía hacer otra cosa que no fuese jugar al fútbol y me tenía que reciclar. Aunque no estaba para jugar de manera profesional sí estaba para hacerlo, por así decirlo, en bolos. A través de unos amigos me metí a jugar en fútbol de empresas, en Hiasa. Ganamos el campeonato de España y trabajé durante un tiempo en la factoría.
- ¿Y después?
-Después fue cuando empecé a trabajar con Luisber (Luis Bernardo Pérez, agente de futbolistas), que es gran amigo mío. Estuvimos trabajando diez años juntos. No me arrepiento, aunque hubo épocas buenas y malas.
- ¿Luisber va a tener relación con el Real Avilés?
-De momento, que yo sepa, no.
- En su presentación eludieron hablar de ascenso, pero resulta difícil creer que llegan pensando en otra cosa.
-Lo primero es confeccionar una plantilla competitiva una vez asumamos el lastre que supone la deuda de los impagos que nos encontramos al llegar. Pero desde luego que no te metes en un club para quedar décimo. Sin decirlo, cuando te metes en un proyecto vas a ser ambicioso. En la cabeza de todos está quedar arriba.
- ¿Están teniendo reticencias de jugadores por miedo a que vuelva a haber impagos?
-Nos está costando convencer a algunos futbolistas de que somos serios y que no va a haber problemas.
- Usted los padeció como futbolista.
-Sí, y es una situación muy complicada. En todos los trabajos es muy duro. Pero en el fútbol, más. Porque aunque estés muy bien preparado y seas el mejor atleta, si la cabeza, que es lo más importante, no funciona...
- ¿Prometen solvencia?
-Sí. Cuando accedí a entrar en este proyecto es porque confío al 100 por ciento en que Norte Proyectos va a cumplir su palabra.
- ¿Conseguirán atraer otra vez al público al Suárez Puerta?
-Vamos a darle un lavado de cara al campo. Queremos que la gente se involucre, tanto a nivel de publicidad como de venir al estadio. Estuve esta temporada en algunos partidos y, no por los jugadores, sino por el ambiente en la grada parecían partidos de solteros contra casados.
