Los banquillos de Segunda B comienzan a asentarse. Siete de los trece equipos del grupo II que próxima campaña competirán en la categoría de bronce ya tienen inquilino. El Langreo, tras la marcha de Hernán, no es uno de ellos. Los de Ganzábal siguen a la espera de confirmar a su nuevo técnico. Dani Mori, ex de la Gimnástica, es uno de los nombres que más gustan en Ganzábal.
El pasado 19 de mayo, once equipos del grupo II se aseguraron la permanencia en Segunda B. A ellos hay que sumarles al Barakaldo, eliminado en la promoción de ascenso, y al Real Unión, salvado en el play-out tras vencer al Jumilla.
Un total de siete de estos conjuntos ya saben quién será su entrenador. El Barakaldo ha confirmado la continuidad de Larrazabal por una temporada. En el filial del Oviedo, Rozada cuenta con contrato para seguir una campaña más al frente del segundo equipo azul, mientras que en el Leioa, Jon Ander Lambea también será el técnico la nueva temporada. El Amorebieta también ha asegurado la renovación de Íñigo Vélez y Miguel Sola se sentará en el banquillo de La Planilla como entrenador del Calahorra un curso más. Los filiales de los conjuntos vascos han apostado por caras nuevas. En el Bilbao Ahtletic, Joseba Etxetbarría será el entrenador de los "katxorros", mientras que la Real Sociedad B tendrá a Xabi Alonso como técnico.
El Langreo no es el único equipo que no ha encontrado entrenador casi tres semanas después de finalizar la temporada. En una situación similar se encuentra el filial del Sporting -donde todo hace indicar que Sánchez Murias no seguirá-, el Izarra -Diego Martínez no repetirá como entrenador-, el Tudelano, el Arenas de Getxo o el Real Unión de Irún, clubes que siguen buscando un inquilino para sus banquillos en la nueva campaña.
