Como en la primera eliminatoria, el Marino de Luanco se aferra a Miramar para doblegar a la Mutilvera. El conjunto de Oli logró un empate a cero en Mutilnova y deberá ganar a los navarros para acceder a la última ronda de la promoción de ascenso a Segunda B. Guaya, el capitán del equipo, elogia al público luanquín. "Si en dos años solo hemos perdido un partido en casa es por algo. Gracias a la afición estamos aquí", apuntó el defensa.

El canario analizó positivamente el partido del Marino en la ida. "Defensivamente estuvimos muy bien. Logramos dejar la portería a cero, que era muy importante. Arriba tuvimos dos muy claras y el árbitro no interpretó como penalti un derribo a Álex Arias en el área", explicó Guaya.

El Mutilvera es todo un clásico de las fases de ascenso a Segunda B. El año pasado fue el campeón de su grupo. Lo eliminó el Vetusta, que subió directamente a Segunda B. En la segunda fase, perdió contra el Salmantino, el cuarto clasificado del grupo de Castilla y León.

"Poco a poco van adquiriendo experiencia en las eliminatorias. Pasaron dos de Copa del Rey y ahora han pasado una en la fase de ascenso", advirtió Guaya sobre el equipo navarro. "No nos sentimos incómodos allí, quizás un poco con el balón pero por el césped -sintético- que estaba un poco gastado", evaluó el veterano jugador del Marino de Luanco.

El conjunto de Oli volvió ayer al trabajo. Toda la plantilla estuvo disponible. El Marino se ejercitará el miércoles, el jueves y el sábado. Lo hará siempre a las diez de la mañana y en Miramar. El duelo contra el Mutilvera es el domingo a las seis de la tarde. "Esperamos que se llene el campo. Hasta allí fueron casi 100 personas y no es viaje cómodo", zanjó Guaya.