La Segunda División ya conoce el nombre de los veintidós equipos que competirán en una temporada en la que el Sporting y el Oviedo volverán a pelear por regresar a la máxima categoría del fútbol español. El Mirandés fue ayer el último en sumarse a una lista con siete caras nuevas que se completa con la caída desde Primera de Rayo Vallecano, Huesca y Girona, y el ascenso de Fuenlabrada, Ponferradina y Racing de Santander. El nuevo escenario pone de manifiesto el protagonismo del Norte en la categoría, siendo catorce los conjuntos de la mitad norte de España. Este jueves se procederá al sorteo de un calendario marcado para conocer las fechas del derbi asturiano, el primero después de que el Oviedo anunciara en marzo que rompía relaciones con el Sporting "temporalmente".
El asturiano no será el único derbi de una Segunda División que esta temporada contará con un total de trece provincias representadas. Al duelo entre el Sporting y Oviedo le acompañarán enfrentamientos como el del Deportivo y el Lugo, en Galicia, junto a otros de mayor rivalidad como el Tenerife-UD Las Palmas, en Canarias o el Huesca-Zaragoza, en Aragón. En Madrid, tres equipos se jugarán mandar en la capital de España, donde al regreso a Segunda del Rayo Vallecano se ha añadido el histórico ascenso del Fuenlabrada. Tras la caída del Rayo Majadahonda, ambos se suman a un Alcorcón convertido ya en un habitual de la categoría de plata. Andalucía se ve diezmada por la vuelta a Primera del Granada y el descenso del Córdoba, dejando en Málaga, Cádiz y Almería sus hasta ahora cinco conjuntos en la competición. Cataluña, que contaba con doble representación a través del Reus y el Nàstic de Tarragona, pasa ahora a tener en el Girona a su único equipo.
El panorama otorga el mando a el Norte, donde la reaparición del histórico Racing de Santander se ha visto reforzado con los ascensos de Ponferradina y Mirandés, plazas de habitual visita de las aficiones del Sporting y el Oviedo, dos de las más viajeras de la categoría. A rey muerto, rey puesto, y los conjuntos de Segunda División empiezan ya a tantearse en la carrera de un mercado veraniego de pulsos en los despachos para firmar futbolistas y mover topes salariales. El recién estrenado mes de julio trae un balón debajo del brazo.
