Los seis detenidos por tráfico de estupefacientes en relación con el ciclismo han sido puestos en libertad tras declarar en el juzgado de instrucción número 4 de Pola de Siero. Cinco de ellos pertenecen al equipo ovetense Kuota-Construcciones Paulino y el sexto es el propietario de una farmacia en Lugones. El primero en declarar fue Andrés Pérez, colobiano de 22 años, y declaró ante los medios a su salida del juzgado que "se ha armado un gran lío con esto, pero no hemos hecho nada".

En la madrugada del martes, doce funcionarios de la Policía Nacional registraron tres domicilios de Lugones, donde detuvieron a los corredores colombianos Andrés Pérez y Steven Calderón, y al bielorruso Alexander Piasetski, y otro de Candás, la residencia de uno de los directores del equipo, Ramón Álvarez, Monchi. Otro de los directores, Isaac Ovies, fue detenido en su domicilio de Oviedo. La sexta persona detenida es Jorge Luis, “Coque”, Montero, propietario de una farmacia en Lugones. Otro corredor del equipo, el británico Tom Armstrong, no pudo ser localizado.

Además de las detenciones, los agentes se incautaron tanto en los domicilios como en la farmacia de medicamentos que podrían ser dopantes. Tras pasar la noche en los calabozos de la comisaría de Oviedo, los implicados prestaron declaración durante la mañana en el juzgado de Siero. El primero en salir fue Andrés Pérez, de 22 años, que declaró que “se ha armado un gran lío, pero no hemos hecho nada”. Después le siguieron sus compañeros Steven Calderón y Alexander Piasetski, ambos de 26, Coque Montero, Ramón Álvarez, Monchi e Isaac Ovies, que además de su cargo en el equipo es funcionario del Ayuntamiento de Oviedo.