Que el Marino de Luanco tiene plantilla para mantenerse en Segunda B es un hecho. Ahora, toca demostrarlo. Para ello, el conjunto de Oli debe empezar a crecer en Miramar, un fortín en las dos últimas temporadas en el que salvo excepciones, como el partido contra el Vetusta hace dos temporadas, apenas ha cedido puntos.

Si bien, en su regreso a la Segunda B el conjunto luanquín no está teniendo toda la fortuna ante su público. De 24 puntos en juego solo ha sumado cuatro y solo uno de ellos en Miramar. Fue en el empate ante el Melilla, justo después de sumar el primer triunfo del año ante el filial del Celta. Desde entonces, dos derrotas seguidas.

El rival para empezar a cambiar la dinámica no es el más propicio. El Peña Deportiva todavía no ha perdido ni un solo partido lejos de Ibiza. Hasta la fecha, ha ganado dos encuentros y ha empatado otro. Fruto de ello marcha en lo más alto de la clasificación. Es tercero, con 16 puntos. De esos 16, siete los ha sacado en campo ajeno. Un gran registro para un equipo que está siendo la revelación del difícil grupo en el que están los asturianos.

Para tratar de ganar, el Marino ya sabe que tendrá que ser cauto en el área, después de haber perdido sus dos últimos encuentros por la mínima y desde el punto de penalti. Fue contra Las Rozas y contra el Inter de Madrid.