El tenista asturiano Pablo Carreño (Gijón, 1991) está teniendo un final de año mucho más dulce que el comienzo, cuando las lesiones le hicieron caer muchas posiciones en la clasificación mundial. Ahora, ya recuperado, ha vuelto a ganar torneos y esta pasada semana formó parte del equipo español que se adjudicó por sexta vez la Copa Davis, que además estrenó formato.
- Estará eufórico, supongo.
-Muy contento, la verdad es que es un sueño haber conseguido este título, asimilándolo todavía.
- ¿Qué diferencia hay entre levantar una Copa Davis y cualquier otro trofeo?
- No tiene nada que ver. El tenis es un deporte individual, pero cuando tienes la oportunidad de jugar en equipo, ganar y poder celebrarlo con los compañeros, es muy diferente. Ganas y pierdes en equipo, vives un partido con la misma intensidad ,aunque no estés tú jugando. Con este formato de la Copa Davis serán una o dos semanas al año las que puedas jugar en equipo y las esperamos con muchas ganas.
- Hablando del formato ¿qué opina de él?
-El formato es un cambio radical, pero es algo que se necesitaba porque estaba un poco obsoleta. Los jugadores top no acudían a las eliminatorias, sobre todo si eran fuera de casa, y aquí estuvieron todos los de los países que se clasificaron excepto Zverev. Fue una semana complicada porque llegas con muchos partidos y con la gente cargada físicamente. Es una primera edición y ha tenido bastante éxito. Pero hay cosas que se van a mejorar para el próximo año como los horarios, abrir alguna pista más, aumentar los días y que sean diez en vez de siete porque esta semana ha sido de locos con cinco eliminatorias en seis días. Son cosas que se le fueron diciendo a la organización y que tomó nota de ello.
- El contratiempo vivido por Roberto Bautista ¿cómo afectó al equipo?
-El equipo es una piña, así que la muerte del padre de Roberto fue un mazazo. Nos habíamos clasificado como primeros de grupo y justo el día de descanso llegó la noticia y se tuvo que ir, fueron momentos duros. Hicimos todo lo posible por ganar la eliminatoria para que tuviera algo positivo en esos momentos tan duros. Al final no solo volvió, sino que jugó en la final y ganó su partido. Es un fuera de serie.
- No pudo jugar un partido por un problema en una pierna, ¿qué pasó?
-Durante mi partido contra Pella tuve problemas en la pierna izquierda. Fueron fruto tanto de la dureza del partido como de la tensión. Al día siguiente no estaba bien y era preferible que jugase Feliciano que estaba al cien por cien ya que yo que estaba al cincuenta.
- ¿Qué planes tiene ahora?
-La temporada ha terminado y lo primero es recuperarse de la pierna, descansar y dentro de poco comenzar a preparar ya la próxima temporada.
- Una temporada atípica porque hay Juegos Olímpicos.
-El año que viene el calendario se aprieta por los Juegos y obviamente es un objetivo como lo fue este la Copa Davis. Me gustaría poder disputarlos y conseguir una medalla. Sería otro sueño.
- La temporada acabó mucho mejor que comenzó.
-A principio de temporada estuve mucho tiempo parado por culpa de las lesiones. No acababa de coger ritmo, de poder jugar torneos seguidos y eso es muy duro para la mente de cualquier jugador. Con trabajo conseguí salir adelante. A partir de la gira de Estados Unidos fui jugando torneos seguidos y cada vez estaba mejor físicamente. Creo que he acabado la temporada jugando a un nivel muy alto, muy contento, con confianza y logrando resultados.
- ¿Ya sabe dónde poner la réplica de la Copa Davis?
-De momento estará en mi casa de Barcelona, luego ya pensaré si queda aquí o va a Gijón. En cualquier caso, estará en un lugar principal. Es la joya de la corona.
