No estaba teniendo fortuna el filial del Sporting en las últimas semanas. Ya le había faltado en la última jornada frente al Melilla y en la mañana de ayer ante Las Rozas parecía que el guion iba a ir por los mismos derroteros. Con un comienzo de partido un tanto esperanzador en el que Gaspar Campos y Pablo García dejaron muestras de su calidad e incluso vieron cómo se les anulaba un gol, fueron los madrileños los que se adelantaron en el marcador. Era el mejor momento de los rojiblancos. Los de Samuel Baños, que contaban con las bajas de Berto y Gragera tras haber jugado con el primer equipo en Miranda, no tuvieron opción de reponerse puesto que el gol del madrileño Juanma llegó justo antes del descanso.

Rubén Blanco botó una falta que remató a la red Juanma tras ser prolongado el balón por Gonzalo Expósito. Fallo defensivo en una jugada a balón parado que hizo mella en los rojiblancos. Los de Mareo necesitaban reponerse. La sombra del descenso acechaba y más tras la victoria del sábado del Oviedo B en El Requexón.

El filial rojiblanco llegaba al área rival, con más posesión que ocasiones. De hecho, poco tuvo que hacer el portero de Las Rozas durante la primera mitad.

La lluvia no dio un respiro a los futbolistas durante los noventa minutos. El juego se vio diezmado por el agua que acumulaba el terreno de juego. Los pases no llegaban a su destino y conducir un balón era imposible. Así todo, el Sporting B no olvidó que al fútbol se juega con el balón. Los de Samuel fueron dueños de la pelota y durante la segunda mitad fueron poco a poco comiendo terreno a Las Rozas.

Garci e Iván Elena entraron en el campo en busca de un poco más de llegada. El Sporting no podía caer en casa tras el tropiezo de Melilla. Los madrileños estaban contentos con el resultado, pero no aprovecharon ninguno de los fallos defensivos rojiblancos. Tampoco los desajustes en la retaguardia cuando los de Samuel daban un paso hacia adelante.

Las Rozas, bien cerrado atrás, sin fisuras entre centrales, necesitaba la ayuda del centro del campo ya que el Sporting B amenazaba siempre por esa parte del rectángulo de juego. Por ahí llegaron los dos goles. Nadie contaba con ellos, pero los dos tantos rojiblancos, en la recta final y con dos zarpazos desde fuera del área, sorprendieron a los de Lolo Escobar.

El primero en probar fortuna y acertar fue Gaspar Campos. Su tiro se coló por el palo izquierdo de Yelco. Quedaban nueve minutos y un mundo para Las Rozas, que se conformaba con el empate en aquel momento. Con el tiempo cumplido, otro intento desde fuera del área, calcado al de Gaspar, y la vuelta en el marcador. Garci fue el que acertó y el que saca con ese gol al Sporting B del descenso. Respira el filial y respira Samuel Baños.