Carla Suárez, número 55 del ránking de la WTA, anunció ayer que 2020 será el último año que dispute el circuito profesional. Suárez aseguró que, a sus 31 años, ha empezado a tener "otras prioridades", que el tenis es "un deporte muy exigente que requiere muchísimo sacrificio" y que además desea dedicarle más tiempo a su familia. "Como sabéis, yo soy canaria y, aunque a los 18 años me mudé a Barcelona, a los 14 o 15 ya estaba viajando por el mundo, y llevo mucho tiempo alejada de mi familia. El tiempo pasa, no lo podemos recuperar y me apetece mucho estar con ellos. Siento que es lo correcto, y es lo que el corazón me pedía", confesó.

En cualquier caso, Carla Suárez advirtió de que nadie espere que vaya a relajarse. "Todavía estoy en condiciones de jugar un año más aspirando a todo. Tanto mi equipo como yo estamos comprometidos y queremos terminar de la manera más profesional posible".