Un espléndido partido del Atlético de Madrid rompió las ilusiones de un Langreo que entra en descenso. Desde el minuto uno de partido el dominio de los rojiblancos castigaba a los asturianos a no dejar de defender durante los noventa minutos. A esto hay que añadirle los dos fallos puntuales que costaron dos goles y sentenciaron un encuentro con una desigualdad palpable.

Los locales no tardaron en tomar ventaja en el marcador, en el minuto 8, y además causaban peligro con mucha facilidad. Poco después llegaba el segundo para los locales: un pase de Adrián Torre rebotaría en Riquelme que, sin querer, introdujo el balón dentro de su portería. Un error que sentenciaba y daba más tranquilidad a un Atlético B arrollador. Riquelme pudo anotar el tercero con una volea que se marchó a escasos centímetros del poste.

Los locales disfrutaban con el balón en los pies, regateaban, pasaban y les salía todo bien ante la desesperación del conjunto visitante, que era incapaz de generar jugadas ofensivas o contragolpes. El bloque defensivo del Atlético B impedía cualquier tipo de acometida asturiana.

Tras la reanudación, el Atlético hacía el tercero. Un centro desde la banda derecha de Isaac se paseó por toda la defensa verde, hasta que llegó el pie de Riquelme que, en dos instancias, marcaría su segundo gol de la tarde. El Langreo había empezado más extrovertido este segundo tiempo, pero el gol le devolvía al ritmo del primer tramo. No tardó el cuarto gol en subir al marcador: un error defensivo de Alain regalaba un mano a mano a un Camello letal, que definía a la perfección para castigar al Langreo.

La ocasión de los asturianos llegaría por parte de Montero, con un disparo con la zurda que forzó la palomita de un inspirado Conde. Riquelme volvería a tener en sus botas la oportunidad de llevarse el balón a casa, pero el disparo que ejecutó fue atajado por Torre, que en esta jugada sí estuvo acertado.

La separación entre la línea defensiva y del medio le estaba costando caro al Langreo, y éste era un espacio aprovechado por los atacantes del conjunto madrileño.

Finalizaba el encuentro con el cuatro a cero definitivo y con una mala imagen de los asturianos. La victoria provocaba un disfrute tremendo de los jugadores del Atlético B: todo le salió bien a los del entrenador asturiano Nacho Fernández.

Dani Mori hace balance. El entrenador langreano, Dani Mori, señaló que "el partido no tuvo mucha historia, nos penalizó mucho el primer gol, el equipo estaba bien plantado, sabíamos que tendríamos opciones, pero así es complicado y luego todo le vino de cara al Atlético B". El técnico asturiano añadió que "es una derrota dolorosa. Analizando los goles, no es habitual haber tenido estos despistes, pero tenemos que pasar página cuanto antes y pensar que tenemos que ganar el próximo partido en casa ante el Real Madrid Castilla, no hay mucho más".