"Año nuevo, vida nueva". El Navarro está cumpliendo sus mejores propósitos en estas primeras semanas de 2020. Y es que atendiendo solo a los resultados de enero y febrero, los azulgrana son, junto a Lealtad y Covadonga, los mejores de la Tercera División. ¿El secreto? "Mejor calidad en los entrenamientos, más acierto de cara a gol y solidez defensiva", confiesa su entrenador, Héctor Suárez Bayón.
En estas cinco primeras jornadas de 2020 el Navarro ha cosechado cuatro victorias y un empate. Urraca, Vallobín y Mosconia cayeron derrotados -todos por la mínima- en Tabiella. A domicilio venció al Siero y empató con el Lealtad, en un encuentro disputado en Les Caleyes, en el que los de Valliniello estuvieron a unos segundos de romper el récord de los maliayos, que acumulan 61 partidos de Liga invictos y que consiguieron rescatar un punto de penalti en el último minuto del añadido.
Esta racha ha elevado al Navarro hasta el décimo puesto de la clasificación. Tiene un colchón de ocho puntos sobre los puestos de descenso y está a doce de los 40 que se ha marcado como gran objetivo. "Pese a la buena clasificación y racha, no nos relajamos", advierte el entrenador azulgrana, "muy contento" con el estirón de los suyos.
En cuanto a la receta del éxito de este Navarro, el entrenador lo tiene muy claro. "Estamos teniendo más acierto que al inicio de la temporada en ciertas situaciones y hemos ganado en solidez defensiva", desgrana sobre una mejoría que achaca a una mayor calidad en los entrenamientos: "Hemos sumado efectivos con los fichajes y algunos jugadores que tenían problemas laborales para entrenar los han solucionado".
Esas incorporaciones son Lucas Le Lann, lateral izquierdo francés "que venía de haber disputado una docena de partidos como titular en L' Entregu"; el delantero Abdi, también galo, "que tiene unas condiciones terribles para la Tercera División"; el centrocampista colombiano Cristian Collazo, "que había estado a prueba con el Vetusta y el Praviano y que se había quedado sin ficha por un tema burocrático que sí pudimos resolver en el Navarro"; y el uruguayo y ex del Real Avilés Nico Pandiani, "un futbolista contrastado que conoce la categoría".
"Económicamente son jugadores rentables para el Navarro y hemos conseguido reforzar los puestos que necesitábamos con jugadores de nivel", concluye el entrenador azulgrana sobre sus nuevos fichajes.
"En los primeros meses de Liga, la clasificación no reflejaba el juego del equipo. Ahora estamos teniendo más acierto de cara a portería y mucha solidez atrás", destaca el defensa Borja Sebares, uno de los más veteranos del vestuario blanquiazul, en el que lleva una década. "Ahora jugamos con cinco defensas y a los rivales les cuesta mucho hacernos daño. Apenas nos generan ocasiones", abunda el avilesino sobre una realidad palmaria: en las últimas cinco jornadas sólo han encajado dos goles. Uno de ellos, el que les anotó el Lealtad, fue de penalti.
Además de al nuevo sistema táctico y a los fichajes, Sebares también achaca la buena racha de los suyos a la unión del vestuario. "Somos muchos los que llevamos tiempo aquí. Es un grupo muy bueno en el que más que compañeros somos amigos. Quedamos después de los entrenamientos, nos reunimos a comer cuando jugamos por la mañana... Y eso se refleja en el campo", trasluce el defensa, reconvertido a carrilero derecho en el nuevo sistema de Suárez.
Este domingo, el Navarro recibe al Llanera, uno de los gallitos de la categoría. Lo hace con la ilusión de mantener su racha y dar un paso más hacia la permanencia. "Lo que no podemos hacer ahora es creérnoslo. Como nos durmamos, esta categoría nos pasa por encima", advierte el entrenador.
