Estrellas del deporte, la música y el espectáculo se dieron cita este lunes en el Staples Center de Los Ángeles para rendir un homenaje muy especial a Kobe Bryant y su hija Gianna, quienes perdieron la vida en un accidente de helicóptero, que se cobró la vida de otras siete personas. Una celebración por la vida de Kobe y Gianna en la que Vanessa Bryant ofreció uno de los discursos más poderosos de la noche al leer una carta de despedida a su hija y su marido, que tocó la fibra sensible de todos los asistentes.

Demostrando una gran fortaleza, Vanessa comenzó hablando de su pequeña Gianna, a quien definió como "su rayo de sol y el dolor más grande de su corazón". Después le dedicó una última declaración de amor a su marido, el amor de su vida y su compañero de batallas.

"Era mío. Era mi todo. Kobe y yo estuvimos juntos durante 16 años y medio. Fui su primera novia, su primer amor, su mujer, su mejor amiga, su confidente y su protectora. Fue el marido más increíble. Kobe me quería más de lo que jamás podría expresar o explicar con palabras. Él era el que se levantaba pronto por las mañanas y yo la que se acostaba tarde por las noches. Yo era el fuego y él, el hielo; y viceversa algunas veces. Nos equilibrábamos. Hacía cualquier cosa por mí. Era carismático, un caballero. Era cariñoso y romántico. Era el romántico en nuestra relación", se arrancó Vanessa Bryant.

Después, continuó así: "Esperaba con ansias el día de San Valentín y nuestros aniversarios todos los años. Él planeaba viajes de aniversario muy especiales y siempre tenía un regalo para mí en cada aniversario. Los regalos que guardo con más aprecio los hizo a mano. Simplemente innovaba en nuestra relación y era atento conmigo incluso cuando más duro trabajaba para ser el mejor deportista. Me regaló el cuaderno original de 'El diario de Noah' y el vestido azul que Rachel McAdams llevaba en la película. Cuando le pregunté por qué eligió el vestido dijo que se debía a la escena en que Ali regresa con Noah. Teníamos esperanzas de envejecer juntos, como en la película. Realmente tuvimos una increíble historia de amor. Nos amábamos con todo nuestro ser; dos personas perfectamente imperfectas que formaban una familia hermosa y criaban a sus dulces y maravillosas chicas".

Vanessa Bryan también recordó los días antes del accidente: "Un par de semanas antes de su muerte, Kobe me envió un dulce mensaje de texto y mencionó cómo quería pasar nuestro tiempo juntos: solo nosotros dos, sin nuestras hijas, porque además de su mujer era su mejor amiga. Pero nunca tuvimos la oportunidad de hacerlo. Estábamos ocupados cuidando a nuestras niñas y simplemente cumpliendo con nuestras responsabilidades cotidianas. No obstante, estoy agradecida por el mensaje. Significa mucho para mí. Kobe quería que renováramos nuestros votos. Quería que Natalia se hiciera cargo de su compañía y quería viajar por el mundo".

Respecto a cómo imaginaban su futuro juntos, Vanessa Bryant relató: "Siempre hablábamos sobre cómo queríamos ser los abuelos divertidos de los hijos de nuestras niñas. Él habría sido el mejor abuelo, al igual que era el mejor padre. Él nunca dejaba la tapa del inodoro levantada. Siempre le decía a las chicas lo hermosas e inteligentes que eran. Les enseñó a ser valientes, a seguir adelante cuando las cosas se ponían difíciles. Cuando Kobe se retiró de la NBA se ocupó de dejar y recoger a nuestras niñas en el colegio, ya que yo estaba embarazada de Bianka y amamantando a Capri. Y cuando Kobe todavía jugaba llegaba una hora antes para ser el primero en recoger a Natalia y Gianna del colegio".

"Disfrutaba de ese tiempo con nuestras hijas. Era un padre cariñoso, práctico y presente. Me ayudaba a bañar a Bianka y Capri casi todas las noches. Les cantaba canciones en la ducha y les hacía reír mientras les preparaba para dormir. Tenía unos brazos mágicos y hacía que Capri se durmiese en solo unos minutos caminando arriba y abajo por el pasillo. Le encantaba llevar a Bianka a jugar al Estanque de Koi y al parque. La última visita al Estanque de Koi fue la noche antes de que él y Gigi murieran. Además, compartía su amor por el cine con Natalia. Disfrutaba llevándola a ver todos los estrenos en cartelera y hacían maratones en los que disfrutaba cada segundo. También le gustaban las típicas películas lacrimógenas. Le encantaba 'Mujercitas'", señaló al respecto.

"Tenía un gran corazón. Kobe, de alguna manera, sabía dónde me encontraba en todo momento. Especialmente cuando llegaba tarde a sus partidos. Se preocupaba por mí si no estaba en mi asiento al comienzo de cada encuentro, y a veces llegó a preguntar si había llegado a la seguridad del recinto en el descanso del primer cuarto. Mi yo sarcástico le decía que no iban a perder por 81 puntos en los primeros diez minutos de partido. Creo que cualquier persona con niños entiende que a veces no puedes salir por la puerta a tiempo. Se acostumbró a mi tardanza. El hecho de que podía jugar en un nivel profesional intenso y aún preocuparse por que llegásemos a tiempo es tan solo otro ejemplo sobre cómo la familia era lo primero para él".

No quedó ahí la carta que Vanessa le dedicó a Kobe Bryant. Continuó hablando de su pasión por el baloncesto: "Le encantaba ser el entrenador de baloncesto de Gianna. Me dijo que deseaba haber convencido a Natalia de que también jugara, que podrían haber pasado aún más tiempo juntos de este modo. Pero, también quería que ella persiguiera sus sueños. Una vez vio a Natalia jugar en un torneo de voleibol y se dio cuenta de que era una jugadora muy inteligente y capaz. En otra ocasión me dijo que quería que Bianka y Capri practicaran baloncesto cuando fueran mayores para poder pasar tanto tiempo con ellas como con Gigi".

"Ahora no tienen aquí a su papá y a su hermana para enseñarles, una pérdida que no entiendo... Estoy tan contenta de que Kobe escuchase a Bianka decir papá... Él no estará aquí para dejar a Bianka y Capri en la guardería, no va a estar para decirme que me abrigue o que vaya al médico. No podrá caminar con nuestras chicas por el pasillo ni podrá hacerlas girar mientras bailan y él canta para mí. Quiero que mis hijas conozcan a la increíble persona, esposo y padre que era. El tipo de hombre que quería ser para enseñar a las futuras generaciones que debían ser mejores y no cometer sus errores. Siempre le gustó trabajar y hacer proyectos para mejorar la vida de los niños. Nos enseñó valiosas lecciones sobre la vida y los deportes a través de su carrera en la NBA, su libro, su programa 'Detail' y su pequeña serie de podcasts. Estamos muy agradecidas de que nos haya dejado esas lecciones e historias".

Una emotiva carta de despedida que Vanessa Bryant culminó así: "Escribía las mejores cartas de amor. Gigi tenía la maravillosa habilidad de expresar sus sentimientos en papel y hacerte sentir su amor a través de sus palabras. Era considerada como él. Era muy fácil quererles. Todos gravitaban de forma natural hacia ellos. Eran divertidos, felices, bromistas y amaban la vida. Estaban llenos de felicidad y aventura. Dios sabía que no podían estar en esta Tierra el uno sin el otro. Cariño, cuida de nuestra Gigi. Yo tengo a Nata, Bebe y KoKo. Te queremos y te echamos de menos, mi chico y Gigi. Descansad en paz y divertíos en el cielo hasta que nos veamos de nuevo. Os queremos y siempre os echaremos de menos. Mamá".

Como se anunció previamente, los ingresos de la venta de entradas irán destinados a la Fundación Mamba and Mambacita Sports, la organización benéfica que Bryant creó con la finalidad de brindar oportunidades a los jóvenes a través del deporte. Cantantes como Beyoncé, Christina Aguilera y Alicia Keys honraron a padre e hija con canciones como 'Halo', 'Ave María' o la 'Sonata Moonlight'.