La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La locura del Lealtad

"Queremos entrar en la historia", dice el presidente del club, que aspira a igualar el récord del Orense de 67 jornadas invicto

Pedro Menéndez, presidente del Lealtad.

El Lealtad de Villaviciosa, líder de la Tercera asturiana, vive una semana atípica. El sábado cedió un empate ante el Siero, colista, y el fin de semana se las verá ante el Llanera, segundo clasificado, que podría igualarle a puntos de ganar.

Los de Villaviciosa, pues, se juegan el liderato en un momento clave. Y mucho más. Si no pierden no levantarán ningún trofeo, no habrá ascenso a Segunda B -al menos todavía- y tampoco se prevé una celebración para el recuerdo por la villa, pero sí escribirán una pequeña página para la historia del fútbol nacional. El Lealtad tiene a tiro el récord liguero vigente del Orense, logrado hace 51 años: 67 partidos sin perder. Los de la Villa llevan 66.

"Es una locura, somos un equipo de un pueblín y podemos y queremos entrar en la historia. Si lo conseguimos no vamos a lograr nada, pero el nombre del Lealtad ya queda grabado. Sería una alegría inmensa y un orgullo para el club". Lo dice el presidente y hombre para todo del Lealtad, Pedro Menéndez. "No queremos hablar mucho del tema hasta que lo logremos, pero lo tenemos a tiro y a ver si lo conseguimos. Igual luego jugamos un play-off, o no, quién sabe en el fútbol predecir. Pero el mérito de conseguir el récord no nos los quitaría nadie", dice. El Lealtad buscará igualar al Orense, cuyo verdugo fue otro equipo asturiano, en este caso el Vetusta, formado por aquel entonces por jugadores que luego pasarían a la historia del Oviedo, como Vicente González-Villamil o el recientemente fallecido Chuso. El conjunto azul ganó 0-2 en Orense el 20 de abril de 1969 y esa victoria está señalada como uno de los grandes momentos de la historia de la cantera azul.

El Lealtad quiere ahora hacer el camino a la inversa y dejar su granito. Desde el humilde club maliayo, además, se entiende que la restructuración que ha sufrido el club esta temporada constituye un doble mérito ante el posible récord. El Lealtad, que la campaña pasada vio truncado su ascenso a Segunda B frente al Getafe B, cambió la mayoría de la plantilla y también al cuerpo técnico. "Son cosas que hay que valorar, tuvimos que hacer un equipo nuevo porque se marchó gente muy importante. No recuerdo un momento así, con tanto sin perder, lo más reciente fue el año de Marcelino, que estuvimos trece jornadas seguidas".

El destino ha querido que el Lealtad se juegue entrar en la historia frente a su perseguidor más inmediato, el Llanera, que lleva ocho victorias consecutivas. "Va a ser complicadísimo, es el rival más fuerte que podríamos tener y tendremos que estar atentos a todos los detalles", dice Menéndez, que ayer seguía rumiando el empate contra el colista.

Compartir el artículo

stats