El fútbol modesto, parado durante al menos dos semanas por decisión de la Federación Española. Y el profesional (Primera y Segunda División), pendiente de una reunión que se celebrará esta mañana en Madrid entre la Liga, la Federación, el sindicato de futbolistas (AFE) y diferentes estamentos del deporte rey, reunidos de urgencia ante la crisis sanitaria provocada por la extensión del coronavirus. Además, el organismo presidido por Luis Rubiales decidió aplazar la final de Copa del Rey, de acuerdo con los dirigentes de la Real Sociedad y el Athletic Club.

Ese es el panorama general actual en el mundo del fútbol, debido a la crisis global por el coronavirus, que tiene parado al deporte y altera la rutina del sistema. La Federación Española de Fútbol decidió ayer lo que se intuía y, tras la comisión que tuvo lugar en Las Rozas anunció el aplazamiento de las dos próximas jornadas de Segunda B y Tercera, entre otras competiciones, incluido el fútbol sala.

El organismo nacional explicó así su decisión: "Desde la Federación debemos garantizar la homogeneidad de las competiciones de fútbol, la integridad y el necesario equilibrio competitivo, y dado que se ha constatado que existe imposibilidad real de disputar partidos de fútbol y desarrollar entrenamientos en determinadas ciudades y/o territorios de nuestro país".

La Federación, aunque no es su potestad, es partidaria también de aplazar las dos próximas jornadas en el fútbol profesional, en manos de la Liga, que en las últimas horas recibió presiones de diferentes estamentos en ese sentido. De momento, el único partido aplazado del fútbol profesional es el Mirandés-Numancia de esta jornada, que iba a jugarse el sábado, a petición del Gobierno regional de Castilla y León.

En este clima de confusión, la Federación Española también optó por aplazar la final de la Copa entre la Real Sociedad y el Athletic, prevista para el 18 de abril en el estadio de La Cartuja de Sevilla y para la que ya se buscan fecha. Rubiales se reunió con Aitor Elizegi, presidente del Athletic, y Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad y, según varias informaciones, se baraja jugar a finales de mayo.

Mientras, la UEFA decidió también aplazar los partidos ida de los octavos de final de la Liga Europa Sevilla-Roma e Inter-Getafe, previstos para hoy. El presidente del Getafe, Ángel Torres, había advertido horas antes que su equipo no se desplazaría a Milán, asumiendo las consecuencias.

El presidente de la Federación Asturiana, Maximino Martínez, que también es vicepresidente de la Federación Española, estuvo ayer presente en la reunión federativa en Madrid. "Estuvimos todos de acuerdo y creemos firmemente en la decisión. Esperamos que en la reunión con la Liga de mañana (por hoy) se llegue a un consenso que vaya en la misma línea. El aplazamiento parece la opción más razonable", explicó a LA NUEVA ESPAÑA. Martínez conoce de primera mano las inquietudes del fútbol y es optimista de cara al futuro. "Estamos en contacto con varios clubes de Primera y Segunda y todos se muestran a favor de aplazar. Debido a eso, soy optimista y creo que lo más probable es que los partidos de categoría profesional se cancelen durante las próximas semanas", aseguró.

Los conjuntos asturianos con equipos que militan en Segunda B recibieron ayer la noticia del aplazamiento de buen grado. Luis Gallego, presidente del Marino de Luanco, señaló al respecto del aplazamiento de los dos partidos que "es un problema grave que cuanto primero lo abordemos entre todos, mejor". El máximo mandatario acepta de buen grado las medidas adaptadas para tratar de evitar que se expanda el virus, eso sí, ve un perjuicio en lo que se refiere al club luanquín ya que "para un club como el nuestro no nos beneficia nada jugar miércoles y domingo ya que somos diecinueve jugadores en la plantilla y el desgaste va a ser grande". El deseo de Luis Gallego es que "ojalá que con estas dos jornadas quede resuelto el problema".

El presidente del Langreo, Víctor Fernández-Miranda, defendió la medida, que el club había solicitado con una nota pública unas horas antes. "Lo lógico era suspender. No tenía sentido jugar porque los futbolistas no están inmunizados y la Peña Deportiva de Ibiza tenía que coger tres aviones para venir a jugar a Ganzábal", indicó. "Lo primero es la salud. Si hay que jugar de martes, miércoles o jueves, nos da igual. Además, nuestros jugadores tampoco querían jugar a puerta cerrada", añadió. Además, el Langreo suspenderá a partir de hoy los entrenamientos de todos sus equipos, salvo el de Segunda B y Regional.

Samuel Baños, técnico del Sporting B, explicó que "desde el club se han puesto todas las medidas en la prevención de la salud. Solo nos queda seguir trabajando en el día para estar lo mejor preparados el día que se reinicie la competición, que esperamos que sea pronto, porque significará que la situación se ha controlado". El Vetusta, filial del Oviedo que milita en Segunda B, no quiso valorar el aplazamiento, aunque se muestra a favor de la medida.

Positivo en la Segunda alemana. Ayer se conoció que el defensa Timo Hübers, de 23 años, del Hannover 96 de la Segunda alemana, dio positivo por coronavirus. Hübers está en cuarentena en su domicilio y sus compañeros sometidos al test de coronavirus como medida preventiva.