El ciclista asturiano Iván García Cortina se llevó ganando al sprint al eslovaco Peter Sagan, triple campeón mundial, una etapa de prestigio en la París-Niza, la última prueba celebrada esta temporada, un éxito que no se esperaba. "Fue una etapa muy buena, de prestigio. Había llegado con pocas expectativas a la París-Niza porque venía de estar malo, posiblemente con el coronavirus, estuve una semana enfermo y entrené dos semanas. Yo solo fui para ayudar al equipo, sin objetivo personal, y al final gané una etapa muy importante".