Bajo el lema "Volvemos unidos", 600 judokas asturianos participaron el pasado fin de semana en un macro festival desde casa. Conexión a internet era lo único necesario para seguir las clases que los maestros conducían on line para todas las categorías. Según los organizadores, la iniciativa es "una manera de demostrar que el judo está preparado para la vuelta a los tatamis, de que se puede practicar de manera individual y que es un excelente vehículo contra el sedentarismo, la obesidad y el acoso escolar, reforzando la autoestima y los valores de disciplina, respeto y compañerismo". Siguiendo directrices de la Federación Española, la vuelta a los tatamis de colegios, gimnasios y clubes irá aparejada a un estricto protocolo de seguridad: sin calzado, como siempre, espacios más amplios, desinfección entre clases e hidrogeles obligatorios.