El "tackle", la clásica entrada, seguramente la acción más genuina del fútbol inglés, pasará a hibernación durante algunas semanas. Es el punto más llamativo en la lista de requisitos que la Premier League impone para que los entrenamientos en grupo se retomen en el primer paso hacia la reactivación de la competición inglesa. En la Europa futbolística, el deporte se mueve a varias velocidades. Mientras en Inglaterra discuten las condiciones del regreso, en Alemania preparan los primeros partidos, ya este fin de semana. En España e Italia mantienen una postura intermedia, con mediados de junio como fecha deseada para retomar la competición.

La Premier, la competición que más pasiones levanta en el planeta, es a la que le está costando más arrancar. Según un documento al que ha tenido acceso la BBC, solo se permitirán que los jugadores entrenen en grupos de cinco en el retorno a los entrenamientos. Las medidas se extremarán para evitar contagios. Todo el material deportivo que se utilice durante los ejercicios, como conos, deberá ser correctamente desinfectado tras su uso. Los futbolistas serán sometidos a test dos veces a la semana. Y antes de cada sesión, se tomará la temperatura a los futbolistas. Como ya sucede en España, se prohíbe a los futbolistas que compartan vehículo con sus compañeros. Tampoco está permitido el uso del transporte público.

La competición inglesa trata con estas medidas de convencer al gremio de futbolistas, con varias voces discrepantes sobre el regreso. Raheem Sterling, delantero del Manchester City y de la selección inglesa, es uno de ellos: "El momento en el que volvamos tiene que ser seguro no solo para nosotros los futbolistas, sino para todo el personal médico y los árbitros", expuso en su canal de Youtube. Más franco fue Rüdiger, defensa del Chelsea: "Prefiero que le den el título al Liverpool si las vidas de la gente se ven amenazadas". La línea es muy similar a la expresada ayer por Danny Rose, lateral del Tottenham: "El Gobierno quiere recuperar el fútbol porque va a aumentar la moral de la nación. Me importa una mierda la moral de la nación. La vida de las personas está en riesgo. Ni siquiera se debería hablar de que regrese el fútbol hasta que los números hayan bajado masivamente".

La posibilidad de regresar a la actividad ha sido valorada esta semana por el presidente ejecutivo de la Premier, Richard Masters, que confirmó que existe una "voluntad colectiva muy fuerte" por parte de los clubes de "completar la temporada", aunque no se descarta una posible "reducción". Según el directivo, los equipos le habrían mostrado su "preferencia" por jugar en sus estadios en lugar de hacerlo en campos neutrales.

El Gobierno inglés había dado antes el primer paso para retomar la Liga al publicar un documento para el desconfinamiento en los deportes profesionales que contempla el regreso del fútbol a partir del 1 de junio y a puerta cerrada. Los planes de la Premier son regresar el 12 de dicho mes, una fecha que parece precipitada cuando aún no se han retomado los entrenamientos.